¿Vicio o virtud? La historia de por qué los alemanes aman ahorrar

Los alemanes son los campeones del ahorro
Tu dinero -
Los alemanes son los campeones del ahorro. Foto: Pixabay
Los alemanes son los campeones del ahorro. Foto: Pixabay

Berlín.- Los alemanes son los campeones del ahorro. Abren una libreta desde la infancia, coleccionan los descuentos y han convertido la austeridad en un dogma político, ajenos a lo que piensen fuera de su país.

Ni las guerras, ni las crisis, ni las bajas tasas de interés lograron que los hogares alemanes dejaran de ingresar dinero en sus libretas a un ritmo que, aunque no es el más alto de Europa, ronda el 10% de sus ingresos y se mantiene en un nivel elevado desde hace décadas.

A finales de 2017, los alemanes guardaban en sus casas y en el banco unos 2.3 billones de euros (46 mil millones de pesos), según un informe divulgado en enero por el banco central alemán, el Bundesbank.

La ilustración y el protestantismo

Ahorrar se ha interiorizado hasta convertirse en un hábito", explica Robert Muschalla, especialista de historia económica y comisario de la muestra sobre esta "virtud" alemana.

En Alemania el ahorro tiene una dimensión moral y la misma palabra "Schuld" designa tanto la deuda como la falta.

¿Hay entonces una predisposición cultural a ahorrar en la cultura alemana? El historiador hace una mueca cuando se le menciona el vínculo establecido por el sociólogo Max Weber entre la "ética protestante" y el "espíritu del capitalismo", o sea entre la confesión religiosa y la acumulación de capital.

"Esto tiene tanto que ver con el protestantismo como con la Ilustración", matiza Muschalla y recuerda que la fundación de la primera caja de ahorros en Hamburgo, en 1778, debe mucho a las ideas sobre la autonomización del individuo y la importancia de financiar la educación de cada uno.

Es muy sencillo: mientras los franceses hacían la Revolución (en 1789), los alemanes inventaban el ahorro", resume el historiador.

Control social

El auge del ahorro en ese momento preciso de la revolución industrial se debe también a que patrones y autoridades consideran estas libretas un instrumento muy eficaz de control social.

Quien tiene una libreta con un poco de capital tiene algo que perder y no lleva a cabo la revolución, se lamentaba Karl Marx en "El capital".

A partir del principio del siglo XX, la fiebre alemana del ahorro coincide con un ascenso del nacionalismo y las cartillas ayudarán a financiar la campaña militar en la Primera Guerra Mundial.

¿Qué hay de Hitler?

El partido nazi de Adolfo Hitler buscó presentar el ahorro como una "tradición alemana", en oposición al crédito con el que querían identificar a los judíos.

A partir de 1938 los depósitos bancarios hechos por clientes judíos fueron confiscados y entraron a las arcas del Estado.

En las escuelas del Reich se instalaron máquinas de monedas automáticas para alentar a los niños a ahorrar introduciendo sus monedas y perforando sus cartillas.

"Ser tacaño es fantástico"

Después de la derrota de los nazis en 1945, la República Federal Alemana adoptó los valores de Occidente y se convirtió en una dinámica economía capitalista.

Pero a diferencia de otros países desarrollados, los alemanes no recurrieron al crédito para financiar el consumo y preferían guardar sus marcos en la cuenta hasta que pudieran permitirse un coche, un refrigerador o una televisión.

Por ejemplo, existieron afiches publicitarios con leyendas como "Geiz ist geil", que se traduce como "Ser tacaño es fantástico", de una campaña de una cadena de productos electrónicos en los años 2000.

*livm

Tips para tus finanzas personales directo en tu correo.
Al registrarme acepto los términos y condiciones

  TAGS

Taboola
Icono de te puede interesar de en dineroenimagen

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR