Alcanzan TLCAN 2.0… binacional, ¿o trinacional?

En la conferencia de prensa-telefónica sui generis entre Donald Trump y Peña Nieto se celebró, por ambos, la culminación de las negociaciones comerciales bilaterales para alcanzar una renegociación 2.0 del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) o, mejor dicho, del acuerdo comercial binacional.

TRUMP GANA, PEÑA MANTIENE APERTURA, AMLO NO FRENÓ

Y sí, Trump logró renegociar lo que más le interesa, el sector automotriz dentro del TLCAN. Y Peña Nieto también alcanzó un nuevo acuerdo para mantener el acceso al principal mercado de exportación.

Por ello, López Obrador también estaba complacido con ese acuerdo comercial, pues le quitó el peso de encima de tenerlo que renegociar, ya que, incluso, puso de su parte para evitar que la apertura energética fuera un freno en las negociaciones por parte de ellos y garantizar los acuerdos en ese rubro que ya se han realizado.

Ahora falta Canadá. El domingo pasado, Peña Nieto y el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, mantuvieron una larga conversación. A México le interesa que Canadá entre al acuerdo comercial para que siga siendo Tratado de Libre Comercio de América del Norte, en primer lugar, porque Canadá ayudará a ser un contrapeso frente al poderío estadunidense, pero también porque con Canadá se estaría regresando al espíritu regional.

LE LLAMAN DE LA CASA BANCA

Donald Trump estaba feliz. La llamada telefónica con Peña Nieto, televisada, tenía como telón de fondo a los negociadores mexicanos sentados al lado de Trump en la Casa Blanca: Luis Videgaray (el canciller), Ildefonso Guajardo (el negociador en jefe) y Jesús Seade (el negociador del próximo gobierno).

Trump se mostró complacido con el resultado, pues lo podrá presumir con su electorado. Lo que más le interesaba a Trump es quitarle un poco de atractivo a México para las inversiones, sobre todo las automotrices. Lo logró.

SECTOR AUTOMOTRIZ, MÉXICO CEDE, AUNQUE…

El sector automotriz tendrá dos nuevas condiciones. Por un lado, la regla de origen regional para producir un automóvil se eleva de 62.5 a 75% para ser producido en México, EU y Canadá, tal como solicitaba Estados Unidos.

Y la otra condición fue que entre el 40 y el 45% de la producción automotriz (40% de autos ligeros y 45% de pick ups) se produzca en regiones con altos salarios, de 16 dólares la hora, que, sobre todo, tiene EU.

Así, la industria automotriz mexicana seguirá teniendo pleno acceso al mercado estadunidense, pero, desde luego, se encarece con mayor contenido regional y el contenido producido en zonas de altos salarios.

Ello no será tan malo si México deja de producir con tan bajos salarios y, además, si crea proveeduría nacional. Tiene cinco años para hacerlo. Ya veremos la postura de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

AGROPECUARIO, MÉXICO GANA

México gana al mantener el acceso al principal mercado de exportación, el de Estados Unidos. Y sí hay un sector mexicano ganador: el agropecuario. Incluso los negociadores mexicanos, como Ildefonso Guajardo, pero también los representantes sectoriales, como Bosco de la Vega, presidente del Consejo Nacional Agropecuario, estaban totalmente complacidos. México mantendrá su fuerte exportación de hortalizas y frutas del campo a EU, sin aranceles temporales. Y EU nos seguirá exportando granos. Fue ganar-ganar.

LOS NEGOCIADORES

Quedan escasos días (esta semana) para que Canadá pueda sumarse al acuerdo. Veremos si lo logran, pues traen pendientes los temas lácteos y de solución de controversias. Mientras tanto, debemos decir que la labor del equipo negociador mexicano fue eficiente. Liderados por Ildefonso Guajardo, que puso contrapropuestas inteligentes, el gobierno mexicano negoció bien. Por el lado privado estuvieron en el Cuarto de Junto Moisés Kalach y también Juan Pablo Castañón, presidente del Consejo Coordinador Empresarial.

Y el canciller Luis Videgaray ayudó a abrir puertas en la Casa Blanca. También debemos decir que Jesús Seade, el negociador del próximo gobierno, puso de su parte al evitar ser un freno y presentar una postura mexicana sólida.