José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

26 Oct, 2018

AMLO rechaza crisis financiera: pagaremos

López Obrador tiene claro que si se cancela Texcoco, hay que pagar a los inversionistas y empresarios, tanto a los inversionistas en seis mil millones de dólares y Fibra E, así como a las compañías constructoras.

Y aunque sabe que Texcoco es la opción más idónea para el sector financiero y el sector aéreo, también sabe que las consecuencias negativas de su cancelación pueden ser mitigadas si busca pagar los compromisos financieros.

“No habrá crisis financiera por la cancelación de Texcoco”, dice el Presidente electo. Él está confiando en que al platicar con las compañías constructoras de Texcoco, ellas podrán tener un contrato similar en el nuevo aeropuerto de Santa Lucía.

Y está confiado en que los tenedores de bonos podrán seguir teniendo su rendimiento gracias al uso de la Tarifa Única Aeroportuaria (TUA ) que se le cobra a cada pasajero de avión.

KALACH: PODRÍAN DEMANDAR A MÉXICO EN PANEL INTERNACIONAL

Sin embargo, la cancelación de una megaobra como la de Texcoco, no es tan fácil. Hay muchos recovecos… y demandas en ciernes.

Tan sólo ayer Moisés Kalach, jefe negociador de acuerdos comerciales por el sector privado, daba a conocer que la cancelación del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) podría traer el no cumplimiento de obligaciones comerciales, que están garantizadas por cláusulas de los tratados comerciales.

El capítulo 11 del nuevo TLCAN (ahora T-MEC) le brinda a las inversiones de EU y Canadá protección ante cambios radicales en los contratos. Y sí, para Kalach, las empresas podrían basarse en los estatutos del recién negociado T-MEC para demandar al gobierno mexicano en paneles internacionales.

LOS COSTOS DE CANCELAR TEXCOCO

López Obrador junto con Javier Jiménez Espriú han detallado que los costos por cancelar Texcoco serían de alrededor de 100 mil millones de pesos, mientras que los directivos de la obra señalan que los costos de cancelación serían mayores, de 120 mil millones de pesos.

Tan sólo la pura construcción total del Tren Maya está calculada en 150 mil millones de pesos. Cancelar Texcoco saldrá caro, aun platicando con las compañías constructoras y utilizando el TUA para pagar los bonos. Lo malo serían los costos de cancelar la obra de Texcoco, y claro, no poder hacer un hub aeronáutico internacional, para tener escalas nacionales e internacionales.

Sin embargo, el Presidente electo quiere dejar en claro que no habrá crisis financiera por cancelar Texcoco, pues su gobierno pagará y resarcirá los daños a contratistas e inversionistas de Texcoco. Aunque, como sabemos, los costos de esos daños pueden ser mayores y no tan fáciles de pagar.

18 INSTITUCIONES FUERA DEL SPEI POR CIBERATAQUE

El gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, nos confirma que son 18 instituciones financieras las que están fuera del Sistema de Pagos Electrónicos Interbancario (SPEI). El lunes se tenía alerta amarilla para que instituciones y autoridades estuvieran en comunicación.

Y fue el martes, por la tarde, cuando la compañía aseguradora AXXA confirmó que no podía conciliar sus pagos de tesorería con las cuentas de trabajo, es decir los fondos que enviaba para pagos, no llegaban a la cuenta que tenían que llegar. Ese martes por la tarde se pudo confirmar un nuevo ciberataque.

Y vaya que actuaron rápido. Banco de México, casi de inmediato, sacó a 18 instituciones financieras del SPEI, para que pudieran seguir operando mediante el sistema alterno (COAS). Se trataban de las 17 instituciones que junto con AXA comparten la misma arquitectura de sistemas y, por lo tanto, podían ser blanco del ciberataque.

Tanto Banxico como AXA, informaron rápido y bien. Ese mismo martes por la tarde ya sabíamos que se trataba de un ciberataque, y que AXA avisaba que no habían mermado su base de datos de clientes y que los recursos de los mismos estaban bajo resguardo.

Fue positivo que el Grupo de Respuesta Inmediata, conformado por Banxico, Comisión Nacional Bancaria y de Valores, así como Comisión Nacional de Seguros y Fianzas tuvieron comunicación y pudieron actuar para subir la alerta del sistema de pagos a roja, lo que quería decir que las instituciones tenían que asegurar cada hora o cada dos horas sus pagos.

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