The Economist y AMLO; viene Romo; Meade-empresarios

Una de las publicaciones más influyentes en los temas económicos es el semanario británico The Economist, y esta semana le dedica su portada a López Obrador, justo a una semana previa de las elecciones.

The Economist calificó las posturas económicas del candidato tabasqueño de contradictorias. De inmediato, los economistas cercanos a López Obrador (como Gerardo Esquivel) consideraron que era natural que el semanario británico estuviera en contra de AMLO, porque el candidato tabasqueño ha ido en contra de los preceptos de la influyente publicación.

THE ECONOMIST: HAY CONTRADICCIONES

En efecto, The Economist es un semanario conservador, no hay duda. Pero tampoco hay duda de que es una publicación influyente. Promueve el libre mercado, la democracia y la disciplina fiscal, banderas que, de alguna manera, han ganado consensos a escala global, seas de derecha o izquierda. Pero no son esos temas macroeconómicos los que critica de López Obrador, pues, incluso, recuerda que el candidato de Morena ha estado a favor de las finanzas públicas sanas, de respetar la autonomía del Banco de México y de mantener el TLCAN. Más bien, a The Economist le preocupan los puntos contradictorios de López Obrador. Le preocupa que alguna vez haya desestimado a las instituciones (menciona a la Suprema Corte).

Le preocupa que busque la soberanía alimentaria al regresar a la imposición de precios de garantía, que como sabemos, terminaron siendo aprovechados por los grandes productores y subsidiando ineficiencias en otros sectores (serían mucho mejor programas productivos y bien focalizados). Al semanario británico le preocupa que AMLO quiera realizar dos refinerías, cuando hay muchas otras que se pueden reconfigurar, y lo caro que saldría apostar al combustible fósil.

Le preocupa que López Obrador vaya a bajar a la mitad los salarios de los altos funcionarios públicos, incluyendo el del Presidente, porque saben que cuando bajas salarios, los funcionarios pueden tener el incentivo perverso de completar su salario con… corrupción. Le preocupa la alianza con la Coordinadora de maestros, que iría en contra de la evaluación magisterial (sabemos que los maestros deben ser capacitados, sí, pero también evaluados). Total, The Economist dice que López Obrador es un experimento riesgoso para la segunda economía más grande de América Latina.

Y QUE ANUNCIA A ALFONSO ROMO… COMO CÓRDOBA, TÉLLEZ, JUAN CAMILO

Es curioso que justo cuando iba a publicarse esta crítica de The Economist, el viernes pasado, López Obrador quizá buscó dar un golpe de confianza a los mercados y mencionar que un empresario, conocido y a favor del libre mercado, sería su coordinador de la Oficina de la Presidencia: Alfonso Romo.

El coordinador de la Oficina de la Presidencia es el hombre cercano al Presidente. Su principal asesor y quien se encarga de que la estructura presidencial, incluyendo las órdenes del primer mandatario, se lleven a cabo. Es curioso, pero la Oficina de la Presidencia fue creada durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari (a quién López Obrador sigue tachando de ser “el jefe de la mafia del poder”). En dicha oficina han desfilado personalidades interesantes, que desde luego han sido cercanas a los presidentes. Con Salinas estuvo José Córdoba. Con Zedillo estuvo Luis Téllez. Fox trató de desaparecer la oficina. Con Calderón estuvo Juan Camilo Mouriño. Y con Peña Nieto está Francisco Guzmán Ortiz. Sin duda, el de López Obrador busca ser un espaldarazo no sólo para Romo, sino también un mensaje para los mercados y empresarios de que junto a él sí tendrán a alguien de corte ortodoxo.

MEADE MUESTRA MÚSCULO CON EMPRESARIOS

Mientras se daba la crítica de The Economist a López Obrador, otro de los candidatos, el que sin duda es más cercano a los mercados, es José Antonio Meade. Incluso, cuando le preguntan a Meade qué pasaría si él gana la Presidencia, lo primero que dice es: Se aprecia el peso mexicano. Y ayer el candidato mostró músculo al cerrar su campaña de Empresarios por Meade. Como se sabe, muchos empresarios influyentes han estado con Meade apoyándolo. Desde Juan Antonio González Moreno, presidente de Gruma, hasta Armando Garza Sada, presidente de Alfa, pasando por Pepe Chapur (fuerte hotelero), Pepe Chedraui, José Ramón Elizondo y Javier Usabiaga. Y ayer en el evento asistieron desde los banqueros más importantes hasta empresarios del sector automotriz, consultores y presidentes de multinacionales.