Activo empresarial

10 Sep, 2019

Salud: completar refrescos y tabaco con…

En la Secretaría de Salud ven con buenos ojos la propuesta que lanzó Alfonso Ramírez Cuéllar, de la Comisión de Presupuesto y Cuenta Pública de la Cámara de Diputados, acerca de actualizar por inflación los impuestos de tabaco y refrescos, pero también los de comida chatarra y alcohol.

 
FALTAN COMIDA ALTAMENTE CALÓRICA Y ALCOHOL

En el gobierno de López Obrador hasta consideran que Hacienda se quedó corta en los impuestos para combatir los problemas de salud pública, como son el cáncer de pulmón, la obesidad y la diabetes. Pensarían que a los nuevos gravámenes propuestos a tabaco y refrescos se podría añadir otros impuestos a comida altamente calórica y a los licores.

Delo por un hecho. En la propuesta que presentó Arturo Herrera, secretario de Hacienda, sólo vienen los aumentos en tabaco y refrescos, pero podría haber más sorpresas ya en la licuadora legislativa.

Una de éstas es ir por un combo de todo: tabaco, refrescos, comida chatarra y alcohol. Todos tendrían un aumento impositivo.

 
SÍ HAY IMPACTO EN CONSUMO

En la Secretaría de Salud, a cargo de Jorge Alcocer, y que tiene como subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud a Hugo López-Gatell, se tiene en mente un número: 124 mil millones de pesos. Es el total del presupuesto para salud, y dicho monto podría duplicarse con el combo de impuestos en tabaco, refrescos, comida altamente calórica y alcohol.

Lo importante. Consideran que dichos impuestos sí están teniendo un impacto en el consumo de la población.

Por ejemplo, el impuesto al refresco, en su acumulado del 2014 al 2016, provocó una caída del 12% en el consumo de estas bebidas saborizantes. Y, en alguna medida, está aumentando el consumo del agua.

La propuesta 2020, en el caso del refresco, es actualizar el impuesto (IEPS) con la inflación de los dos últimos años, de 2018 y 2019. El impuesto, actualizado, se eleva de 1.17 pesos por litro a 1.2705 pesos por litro.

En el caso del tabaco, también hay una actualización inflacionaria sobre los cigarros, elevando el impuesto de 35 a 49 centavos por cigarro, con lo que se pagará 9.96 pesos de impuesto (IEPS) por una cajetilla con 20 cigarros.

Y también se homologará el impuesto a la cerveza a tres pesos por litro.

Para la Secretaría de Salud no hay duda. Elevar el precio por medio de los impuestos sí inhibe el consumo de refrescos y tabaco. Y sienten que el combo no está completo, faltando comida altamente calórica y bebidas alcohólicas.

 
¿LECHE TAMBIÉN CON IMPUESTO?

Ésta es otra propuesta, viene del presidente de la Federación Mexicana de Lechería, Vicente Gómez Cobo y, aunque no lo crea, quiere gravar su producto… pero la leche importada en polvo descremada, utilizada para producir derivados, como quesos y cremas. Este tipo de leche en polvo importada es un indicador del precio de mercado de la leche fresca en granjas nacionales, aunque, argumentan los productores del país, con muy mala calidad. Afirman que si se le pone impuesto no estaría mal.