Se les olvidó el ducto en Dos Bocas, deberá transportar por mar a Tuxpan

Algo les está pasando a las obras insignia de la actual administración. Suelen terminarse, pero sin infraestructura externa. Sucedió con el Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles (AIFA), cuya falta de vías de acceso lo hace inoperante. Y puede pasar con la refinería en Dos Bocas. No tiene ductos para transportar lo que produzca… por raro que parezca.

DOS BOCAS, COSTO Y TRANSPORTE MÁS ALTO

Algo sucedió en el diseño de Dos Bocas. Es extraño que no tenga un ducto para poder transportar su producto terminado, como, por ejemplo, gasolinas.

El presidente López Obrador asegura que Dos Bocas (que ahora se llamará Olmeca) va a estar concluida para este 2022. Y ahí hay un debate, sobre si el costo va a ser mayor a los 8,000 millones de dólares o no. Para todos los expertos, la refinería va a terminar costando más de 12 mil millones de dólares.

Más allá de la polémica de su costo final, Dos Bocas, sin infraestructura externa, deberá recurrir al mar, generando mayores costos de transporte.

La refinación de Dos Bocas se deberá mover por mar mediante barcazas, que pueden llegar hasta los 100 mil barriles. ¿A dónde irían esas barcazas? Lo más seguro es que lleguen al puerto de Tuxpan, donde hay capacidad logística para transportar la gasolina a partir de ahí.

Dos Bocas podría tener ductos, pero su construcción sale cara. De por sí hay una crítica al proyecto de refinación por su costo, que rebasó por mucho el pronóstico original. Si se le construye un ducto, no sólo va a ser más tardado, sino más costoso.

¿Por qué a la 4T se le están olvidando las infraestructuras externas? Quizá por problemas de plan maestro, de planeación.

La operación de Dos Bocas va a tener marítima, hacia Tuxpan, o bien a Pajaritos (Coatzacoalcos). Y llegando a Tuxpan hay otro problema, ya no hay capacidad de almacenamiento de combustible.

CUIDADO, MONTERRA DEMANDA POR 667 MDD Y ARBITRAJE

Hay personas que lo relacionan con Dos Bocas. ***The Wall Street Journal***, a finales de febrero, dio a conocer que, en Tuxpan, Monterra Energy, subsidiaria de KKR, está demandando al gobierno mexicano por hasta 667 millones de dólares, y lo podría llevar dentro del T-MEC a un panel arbitral.

Monterra Energy acusa a la CRE (Comisión Reguladora de Energía) de cerrar su terminal de almacenamiento de combustible sin razón.

La CRE la cerró porque la empresa no contaba con los permisos en regla (aunque no lo crea).

Monterra tiene un permiso desde 2014, donde la CRE le permite almacenar gasolina y petrolíferos por 30 años.

Hay mucha especulación sobre por qué la CRE cerró una planta de almacenamiento de gasolina en Tuxpan, máxime cuando por ahí se importa el 80% del combustible que llega al país y es utilizado por las estaciones de servicio privadas. Para los operadores privados, ello permitirá a Pemex ir retomando el control… hasta de infraestructura privada. ¿Será?