Sin Recetas Fase 6, los asesinatos contra Garza Sada y Fernando Aranguren

En los nuevos libros de texto gratuitos viene para nivel secundaria el libro Sin Recetas Fase 6, para maestras y maestros. Ahí se les explica a los docentes en qué consiste la nueva educación, dejando atrás los pronunciamientos neoliberales, pero lo que no se dice es que se está reescribiendo la historia según el punto de vista, unilateral, de la SEP del gobierno obradorista. No se tomó en cuenta a otros maestros ni a especialistas ni a historiadores y menos a representantes estatales.

LA NARRACIÓN DE LOS SECUESTROS Y “AJUSTICIAMIENTOS”

El Consejo Coordinador Empresarial hizo bien en mostrar su preocupación, en particular por el libro Sin Recetas Fase 6, donde habla de la Liga Comunista 23 de Septiembre.

Si bien el libro dice que el secuestro como arma político-militar no fue una estrategia donde la Liga 23 de Septiembre lograra alguna victoria, tampoco condena el secuestro ni tampoco el asesinato de dos empresarios icónicos de aquel momento, Eugenio Garza Sada, en Monterrey, y Fernando Aranguren, en Jalisco. El libro de la 4T dice, textualmente: “El secuestro como arma político-militar no fue una estrategia en donde la lc23s lograra alguna victoria. El primero de sus descalabros ocurrió el lunes 17 de septiembre de 1973 al intentar retener en Monterrey a Eugenio Garza Sada, ícono y leyenda del empresariado mexicano, en cuya acción perdieron la vida (sic) el empresario, su chofer y dos elementos del comando guerrillero. La confrontación entre la iniciativa privada y el gobierno de Luis Echeverría, que ya traía zaga, se vio alimentada con mayor énfasis a partir de este evento”. Continúa: “Para el miércoles 10 de octubre del mismo año, se planeó en Guadalajara el doble secuestro del empresario Fernando Aranguren y del cónsul británico Anthony Duncan, operativos que se realizan sin contratiempos”. Y remata: “Sin embargo, en el ánimo del gobierno de Echeverría no podría haber sucedido mayor desgracia que la ausencia de Garza Sada, por lo que su negativa a negociar para liberar a los cautivos fue contundente. Con el argumento de que el gobierno no pacta con criminales, se cancelaron todas las opciones. Ante la disyuntiva, el comando de la Liga liberó sin ningún beneficio al cónsul británico, pero ajustició al empresario como medida radical”.

Los empresarios saltaron de inmediato. No puedes poner en un libro de texto que “perdieron la vida” cuando, en realidad, asesinaron a Eugenio Garza Sada y a su chofer. Tampoco puedes decir “se ajustició al empresario”, refiriéndose al asesinato del empresario Fernando Aranguren.

NUEVA ESCUELA MEXICANA MANIQUEA EL CONCEPTO EMPRESARIO

Con estos libros de texto se sataniza a los empresarios y se justifica el secuestro y asesinato de los mismos. Con esa formación dirigida a los maestros, imagínese qué pueden pensar los docentes de los empresarios sino considerarlos adversarios.  “La Nueva Escuela Mexicana”, como le han definido a estos nuevos libros de texto gratuitos, no deberían propiciar el odio hacia los empresarios, menos cuando las izquierdas modernas consideran al empresario como un factor clave de desarrollo, de creación de valor, de generación de empleos.

CCE, QUE LA SEP NO REESCRIBA MAL LA HISTORIA

El Consejo Coordinador Empresarial demandó la revisión de los libros, entre otras razones porque “promueven, sin razón, la violencia, el encono y la animadversión en contra de empresas y empresarios que operan en el marco de la ley y que, con sus inversiones, generan empleos y contribuyen al desarrollo del país”. Desde luego, el CCE “exhorta” a las autoridades educativas a enseñar historia sin reescribirla, a Eugenio Garza Sada y Fernando Aranguren se les asesinó. No fue ni ajusticiamiento ni perdieron la vida como dice el libro. La visión del empresario debe entenderse como palanca de desarrollo y, claro, con un Estado rector que evite monopolios, genere competencia, pero que también genere condiciones para crear empleos y desarrollar un empresariado a la altura de los retos sociales y ambientales. Esto no viene en los libros de texto. Sólo viene una descalificación a y animadversión hacia el empresariado.