7 lecciones que puedes aprender cuando eres estudiante de intercambio

Un problema al que me enfrenté cuando iba en tercer semestre de la Licenciatura, fue que comencé a tener dudas sobre si me encontraba en el lugar correcto
Management -
Un problema al que me enfrenté cuando iba en tercer semestre de la Licenciatura, fue que comencé a tener dudas sobre si me encontraba en el lugar correcto. Foto: Pixabay.
Un problema al que me enfrenté cuando iba en tercer semestre de la Licenciatura, fue que comencé a tener dudas sobre si me encontraba en el lugar correcto. Foto: Pixabay.

CIUDAD DE MÉXICO. – En ocasiones cuando sabemos que se acerca el final de algo, es el momento en que más dudas tenemos sobre si todo lo que hemos hecho está bien y si nos encontramos en el camino correcto. Cuando me encontraba en el 7º semestre de la Licenciatura en Ciencias de la Comunicación en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, tuve esa misma sensación, me sentí poco preparada y que tenía la necesidad de buscar algo que afianzara mi seguridad académica.

En julio del 2018, el programa de Movilidad Nacional del Espacio Común de Educación Superior (ECOES) del periodo Agosto-Diciembre 2018 despidió alrededor de 120 alumnos, se trataba de la vigésimo séptima generación en partir, estudiantes provenientes de 17 instancias universitarias, y entre ellos me encontraba yo.

Antes de tomar la decisión pensé que, al tratarse mi último semestre como estudiante, me hacía mucha falta poner en práctica todos los conocimientos que había adquirido en siete semestres de teoría en mi amada UNAM, esto debido a que no me sentía del todo segura de que lo que había aprendido me fuese a servir de algo.

Si estás por terminar la carrera, o si apenas comienzas, pero tienes la impresión de que tal vez no has aprendido nada y que en cuanto a la práctica te quedaron debiendo, aquí te cuento todo lo que un intercambio académico puede hacer por ti y tu vida académica.

1. Escoger la carrera que siempre quisiste y tal vez no pudiste

Un problema al que me enfrenté cuando iba en tercer semestre de la Licenciatura, fue que comencé a tener dudas sobre si me encontraba en el lugar correcto, y a pesar de que no se trató de un problema tan grave que tuviera como solución la deserción escolar, que ocurre en la Ciudad de México a 2 de cada 10 estudiantes, según datos del Instituto Nacional para la Evaluación de la Educación (INEE), sí afectó mi ánimo y mis motivaciones.

Sin embargo, el Programa de Movilidad Nacional te brinda la oportunidad de estudiar cualquier disciplina que sea de tu interés, siempre y cuando las materias seleccionadas puedan ser validas por la UNAM; es decir, a pesar de estudiar Ciencias de la Comunicación me fue posible estudiar la Licenciatura en Cine, con materias en las ya tenía mucho interés, siempre y cuando lograra homologarlas con materias de la misma carrera en la UNAM. En resumidas cuentas, puedes estar estudiando en Medicina y aún así poder estudiar un semestre de Psicología. Sólo para quitarte la espinita del “qué hubiera pasado si…”

2. La práctica hace al maestro, ¿y dónde quedó mi práctica?

La Universidad de Guadalajara, en el Departamento de Imagen y Sonido del Centro Universitario de Arte, Arquitectura y Diseño (CUAAD), que fue la universidad de destino, me ayudó a poner en práctica todo aquello que había aprendido y reforzar los conocimientos adquiridos. Por un lado, los docentes que tuve en la CDMX tenían una inclinación por un método de enseñanza mucho más teórico y ocasionalmente ejemplificaban con elementos de mi interés; mientras que los docentes de la universidad de destino tenían una metodología un mucho más práctica.

Si sientes que tal vez existen materias o disciplinas que en tu plantel o en la misma Licenciatura, de las que te encuentras inseguro o insegura, o que simplemente conocimiento de otra área con la que pudieras complementar tus estudios, sin duda alguna un intercambio académico es para ti.

3. Vivir lejos de casa, el mejor ejercicio de autodisciplina

Al irme de intercambio, lo más difícil para mí fue, sin duda, el partir de casa, ya que no habría alguien que hiciera el super, comida, quehaceres, etc., y a pesar de que es una decisión que tendremos que tomar todos (espero) en algún momento, con este intercambio me vi en la necesidad de hacer un pequeño simulacro y comenzar a tener una particular preocupación por mis finanzas personales.

Al recibir una beca de $5,000.00 MXN, y a pesar de que mis padres pagaban la renta mensual del lugar donde vivía, debía repartir la beca entre necesidades como Comida, Transporte y Materiales Escolares, entre otras cosas que representaban necesidades más personales. Así que aprendí que cada necesidad tenía una prioridad y un porcentaje.

4. Comida

Con el tiempo aprendí que la despensa debería realizarse AL MENOS dos veces al mes y llevando sólo lo necesario, porque nadie quiere desperdiciar ni comida ni dinero; por eso, el mejor tip que puedo darte es realizar una Lista de compras la cual te obligará a revisar qué tienes (para ocuparlo lo más pronto posible) y qué te hace falta. Comprar lo imprescindible te dejará más capital para otras necesidades.

5. Transporte

El transporte no fue difícil, ya que, el Estado en el que viví, contaba con una tarifa para estudiantes, haciendo un descuento del 50%, por lo que gastaba la mitad de lo que normalmente pude haber gastado; por eso, cuando llegues al lugar de destino, te recomiendo que revises las páginas oficiales de la Secretaría de Movilidad para enterarte de las opciones que te pueden ofrecer. Pero, si no es tu caso, te invito a conocer una excelente App de movilidad, que te dará muchas opciones, entre las que puedes escoger las más cortas o las más económicas: Moovit; ésta se encuentra disponible para: Aguascalientes, León, Ciudad de México, Guadalajara, Mérida, Monterrey, Puebla, Querétaro y San Luis Potosí.

6. Material Escolar

El Material escolar, también tiene sus hacks, porque si bien existen cosas que inevitablemente tendrás que comprar, existen algunos materiales que si reflexionas un poco más no son del todo necesarios de adquirir. Tal es el caso de los libros que es bien sabido, desde hace un tiempo, que la producción de éstos es costosa debido a los costos de producción como la encuadernación, el papel, corrección y edición, sin contar con la paga de derechos de autor y el gasto en la distribución; por lo que un comprar un libro cuando sólo leerás un capítulo parece un gasto innecesario. Lo que recomiendo en esos casos es buscar alguna biblioteca pública, que puede ser la misma de tu plantel, y buscar el libro que necesitas, pedir un préstamo o incluso sólo sacar las copias que requieras.

7. ¿Estudiante o Turista?

El estudiar en un lugar ajeno a tu ciudad de origen me dio la oportunidad de explorar otra parte de México que no conocía y también pude comprender un poco más la diversidad de mentes que tiene nuestro país. Al acercarse el final del intercambio, noté que me había administrado bien y que con el dinero extra podía cubrir una necesidad secundaria: viajar.

Una actividad que te recomiendo es, sin duda, viajar acompañado(a), porque en serio te ahorra mucho dinero. En primer lugar, porque todos los gastos se dividen, y no sólo eso, todos aportan ideas de cómo resolver un problema porque dos cabezas piensan mejor que una.

Las escapadas improvisadas lucen bien… en las películas; sin embargo, para lograr un plan viable y económico es de vital importancia la PLANEACIÓN y DISPOSICIÓN. También tienes que se cuidadoso con quién viaja; hay que hablar honestamente de cuánto presupuesto existe y si todos están dispuestos a pagarlo, “cuentas claras, amistades largas”.

Te aseguro que de esta forma gastaras mucho menos y te divertirás mucho más.

CONCLUSIÓN

En verdad, puede sonar a mucho trabajo, y en realidad sí lo es, pero se trata de un crecimiento personal importante. Como ya lo dije, ponerte a prueba en todos los aspectos de tu vida, te llenará de confianza, práctica, y autosuficiencia. Quien piense que la Universidad es un espacio donde te preparas al 100% para la vida profesional/laboral, puede que no esté del todo en lo cierto, pero por ello no quiere decir que la Universidad no te brinde oportunidades y herramientas para hacerlo. Por eso, te invito a que leas las todas convocatorias que encuentres de Movilidad Estudiantil en tu escuela, y si te adaptas a los perfiles y te sientes con la necesidad de aventurarte, HAZLO.

Si yo pude, muy seguramente tú también.

*Autora: Teresa Montero.

Jbf

Tips para tus finanzas personales directo en tu correo.
Al registrarme acepto los términos y condiciones

  TAGS

Taboola
Icono de te puede interesar de en dineroenimagen

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR