Desde el piso de remates
Maricarmen Cortés26 Ago, 2022
Consultas comerciales son técnicas, no majaderas o soberbias
En torno al proceso de consultas sobre la política energética de México, en el marco del T-MEC, hay buenas y malas noticias. La buena es que en la mañanera de ayer el presidente López Obrador ratificó, como ya lo hicieron el canciller Marcelo Ebrard y Tatiana Clouthier, la secretaria de Economía, que México no tiene intención de salirse del T-MEC.
La mala es que López Obrador se mostró nuevamente muy enojado por esta consulta a la que calificó de “majadera”, de “tono soberbio, y de “prepotencia”. Aseguró que las consultas lo sorprendieron tras su viaje a Washington y que se enteró por un tuit del exembajador Arturo Sarukhán, lo que, de ser cierto, sería un megatache para las secretarías de Economía y Relaciones Exteriores.
Reiteró que no hay motivos para las consultas porque en su opinión la política energética no viola el T-MEC y cuestionó además que Estados Unidos considere que la “reforma energética era la panacea”.
Y es una mala noticia porque demuestra que, pese al optimismo de Clouthier y de Ebrard, será muy difícil evitar un panel de controversias y eventuales sanciones arancelarias contra México, porque López Obrador no cambiará de opinión y no quiere entender que su política energética sí viola el T-MEC por el trato discriminatorio a empresas de Estados Unidos y Canadá, cuyas inversiones se realizaron con la reforma energética que tanto cuestiona, pero que sigue vigente porque afortunadamente no logró modificar la Constitución.
SIN SORPRESAS
López Obrador tampoco puede decirse sorprendido por la consulta “majadera” porque en todas las reuniones ministeriales, tanto Katherine Tai, titular del USTR como Mary Ng, ministra canadiense de Pequeñas Empresas, Promoción de Exportaciones y Comercio Internacional, expresaron claramente —y lo siguen haciendo— su preocupación por la política energética de México.
Además, en la reunión del CEO Dialogue US-Mexico en Washington, el mes pasado, no sólo participó López Obrador, sino la secretaria de Energía, Rocío Nahle, y el director de Pemex, Octavio Romero, precisamente por la preocupación de los empresarios por la política energética.
López Obrador debería entender que las consultas comerciales no son ni amables ni majaderas, ni humildes o soberbias, sino técnicas. Hay que recordar que México y Canadá no llegaron a un acuerdo en las consultas con Estados Unidos sobre interpretación de reglas de origen y se inició ya un panel de controversias que concluirá en noviembre y en ningún momento Biden ha despotricado en contra del proceso, que ojalá pierda.
PIB PER CÁPITA: 8 AÑOS DE RETROCESO
México cómo Vamos, que dirige Sofía Ramírez, publicó un análisis sobre el PIB al cierre del 2T que reportó ayer el Inegi con un crecimiento de 0.9% vs. el trimestre anterior..
Señala que el PIB actual se ubica al 98.9% del registrado en el último trimestre de 2019 aunque ya la mayoría de los sectores están por encima de sus niveles pre pandemia con excepción de la construcción que está todavía 7.7% abajo.
Resalta que la economía mexicana mostraba ya debilidad antes de la pandemia, después de alcanzar un pico en el 3T de 2018.
Precisa que la economía mexicana tiene hoy un nivel similar al del 4T de 2017 y lo más preocupante es que el PIB per cápita está aún más bajo: a niveles de 2014, lo que implica un retroceso de 8 años.