Eficaz defensa de Banxico

El Premio Naranja Dulce de esta semana es para el gobernador del Banco de México, Alejandro Díaz de León, por la férrea y efectiva defensa de la autonomía del banco central y por alertar en medios y en la reunión extraordinaria de la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados sobre los riesgos que implican las reformas a la Ley de Banxico para obligarlo a comprarle a los bancos los dólares en efectivo que no puedan ser repatriados a Estados Unidos.

A diferencia de lo ocurrido en el Senado, en el que Ricardo Monreal hizo caso omiso de las propuestas presentadas por Díaz de León para resolver la problemática que sí enfrentan los migrantes para cambiar sus dólares por las restricciones en las operaciones en efectivo, los diputados fueron más receptivos y analizarán las propuestas del banco central.

Como lo hizo en el Senado, Díaz de León explicó a los diputados que, además de violar la autonomía del Banco de México, la reforma pondría en riesgo la relación con la Fed y autoridades de EU por el riesgo de que se transfieran a las reservas internacionales dólares de procedencia ilícita, y reiteró la disposición a trabajar en una solución, como la creación de una base de datos, un consejo en el que participen Banco de México y autoridades financieras lo que presentaría reportes al Congreso y líneas de crédito para bancos con problemas con sus corresponsales.

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RAMÍREZ CUELLAR, HEATH, ESQUIVEL

Naranja Dulce también para los subgobernadores de Banxico, Gerardo Esquivel y Jonathan Heath, nombrados ambos en esta administración y quienes volvieron a demostrar su independencia al criticar la iniciativa Monreal. En su cuenta de Twitter, Esquivel calificó de “lamentable la aprobación de las reformas porque ponen en riesgo las reservas internacionales y atentan contra la autonomía de Banxico”. Por su parte, Heath afirmó que “no se vale reformar una ley para favorecer a una sola empresa, en especial con antecedentes negativos con la SEC de Estados Unidos”.

Bien también por el diputado morenista Alfonso Ramírez Cuéllar, quien afirmó que la reforma “no responde a ninguna urgencia nacional, que es falso que ayuda a familias de migrantes y sólo apoya a bancos que se niegan o no pueden tener corresponsales para repatriar o transferir dólares”.

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MONREAL, OÍDOS NECIOS

El Premio Limón Agrio es, obvio, para Ricardo Monreal y para Alejandro Armenta, presidente de la Comisión de Hacienda del Senado, porque hicieron caso omiso del análisis y comentarios que presentó Alejandro Díaz de León sobre los riesgos de reformar la ley Banxico.

Ante la ola de críticas y preocupación que generó esta reforma, los coordinadores parlamentarios del PRI, PAN, PVEM, PES, PRD y hasta el mismo Morena en el Senado aseguraron estar dispuestos a los cambios que los diputados y el Ejecutivo realicen.

Monreal y Armenta intentaron defender la reforma con el argumento de que hay “millones de migrantes” que se ven afectados al cambiar sus dólares a un menor tipo de cambio porque no se los reciben en los bancos. Armenta trató también de descalificar a Díaz de León porque duda de las cifras oficiales de Banxico e Inegi de que el 99 por ciento de las reservas se envían por transferencias electrónicas.