Exigen colonos participar en rediseño de espacio aéreo

El colectivo Más Seguridad Aérea Menos Ruido, integrado por más de 110 colonias del Valle de México, afectadas por el rediseño del espacio aéreo, libran desde el 25 de marzo de 2021 una intensa lucha legal y mediática ante varias instancias para denunciar los severos problemas de seguridad aérea y en materia de salud por el ruido. 

 En más de un año, los más de 20 amparos que han presentado están en una especie de limbo en el Juzgado 5o, donde se concentraron todos los litigios y no han logrado a la fecha una suspensión. 

En forma paralela han contado a expertos de diversas áreas, no sólo jurídicas, sino aéreas como es la excontroladora María Larriva y también en Ambientales y Medición de Ruidos como Rafael Trovamala, que presentó un estudio sobre el incremento en los decibeles y la afectación para la salud de los colonos afectados por el ruido que, evidentemente, se incrementa en la madrugada. 

 Han denunciado también los riesgos en seguridad aérea, los incidentes que han estado a punto de incurrir en un accidente que, gracias a la habilidad de los pilotos, hasta ahora no se ha registrado, pero que representa un riesgo creciente. 

En forma paralela, el colectivo presentó una denuncia ante la Profepa y reconocen la apertura por parte de la procuradora Blanca Alicia Mendoza para recibirlos 

GRUPO DE INTERÉS 

El colectivo busca también que las autoridades los consideren como un grupo de interés, como lo mandaban los convenios firmados por el gobierno mexicano con la OACI, que, en noviembre, realizará una extensa auditoría a México que es independiente a la de la FAA. 

Desde luego, los problemas derivan de la ineficiencia de la SICT y no sólo de Javier Jiménez Espriú, sino de su sucesor, Jorge Arganis, porque se mantuvo a la dupla integrada por Carlos Morán, quien era subsecretario de Transporte y que, pese a todas las evidencias de su ineptitud, fue nombrado director general del AICM, agudizando la crisis en el aeropuerto, y a Víctor Hernández, en Seneam, quien fue destituido en mayo pasado. 

 Rogelio Jiménez Pons ha intentado, desde su nombramiento como subsecretario, poner orden en el sector y además, por el cambio en Seneam, se afirma que también saldrá Morán. 

 El colectivo ya solicitó reunirse con Jiménez Pons y participar en las mesas de negociación con autoridades de las aerolíneas, y controladores aéreos, donde se analizan los múltiples problemas generados por el rediseño aéreo, porque se deben consideran también las afectaciones a la comunidad. 

EL HORARIO DE DIOS 

Con una encuesta sacada de la manga y estudios médicos hechos a modo, el presidente López Obrador anunció su iniciativa para terminar con el Horario de Verano. La secretaria de Energía, Rocío Nahle, argumentó en favor de eliminar el horario que cada año ha descendido el ahorro en energía y su beneficio, porque cada vez es mayor la población que utiliza focos y equipos ahorradores de energía. 

Lo lamentable, en verdad, es el secretario de Salud, Jorge Alcocer, quien justificó regresar “al horario de Dios”, por los supuestos daños que el Horario de Verano genera a la salud. 

A lo mejor no debería sorprendernos de Alcocer, porque es el mismo que se oponía a vacunar a sus nietos y que no parece preocupado por el creciente número de contagios y muertes por covid-19.