Inicia disputa por contrato colectivo en planta de GM 

Lo que está sucediendo en la planta de General Motors en Silao es inédito y desde este sentido histórico porque es la primera vez que en el marco del T-MEC, y por presión de Estados Unidos después de activar el mecanismo laboral de consulta rápida, se realizó una votación para que los 6,500 trabajadores decidieran si ratificaban o no su actual contrato colectivo y al sindicato Miguel Trujillo de la CTM que no logró convencer a la mayoría de los trabajadores, porque 3,214 votaron por el no y 2,623 por el sí.

Con la nueva ley laboral, todas las empresas mexicanas —incluída Petróleos Mexicanos— tienen que ratificar sus contratos colectivos con votaciones que deben ser transparentes, pero el T-MEC le dio a Estados Unidos las herramientas para intervenir y convocar a estos mecanismos de respuesta laboral rápida si se registran quejas o denuncias por parte de los trabajadores, que fue lo que sucedió en abril pasado en la planta de Silao donde la votación, que sí ratificó el contrato colectivo, mantuvo la titularidad del mismo al sindicato afiliado a la CTM.

Desde luego, Estados Unidos sólo tiene injerencia en las empresas exportadoras a las que puede amenazar con sanciones arancelarias, si no se llega a un acuerdo satisfactorio con los trabajadores, y en el caso del sector automotriz hay un doble interés porque están en disputa las reglas de origen que obligan a que un porcentaje de la producción de los vehículos exportados se realicen en países donde se paga un mínimo de 16 dólares la hora, es decir en Estados Unidos y en Canadá.

VARIOS SINDICATOS INTERESADOS

Se inicia ahora otro proceso inédito que genera muchas dudas jurídicas, precisamente porque es la primera vez que se rechaza un contrato colectivo y porque USTR que pidió la intervención del INE como observador en la votación, seguirá con lupa la evolución del proceso.

La STPS informó que la votación se realizó sin incidentes y que en un plazo máximo de 20 días hábiles publicará su resolución y desde luego se desatará una feroz disputa entre al menos tres sindicatos interesados en quedarse con la titularidad del nuevo contrato colectivo, incluido el Miguel Trujillo, aunque no logró convencer a la mayoría de los trabajadores.

Entre las dudas que tendrá que resolver la STPS está el mecanismo para la definición de cuál será el sindicato que demuestre tener la mayoría de trabajadores y desde luego tendrá que haber una nueva votación para ratificar el nuevo contrato colectivo que es de suponer será negociado con mayores prestaciones para los trabajadores.

GM, PENDIENTE DE RESOLUCIÓN

El caso de Silao preocupa a toda la industria automotriz por la ratificación de sus contratos colectivos. General Motors, que preside en México Francisco Garza, informó que estará pendiente de la resolución de la STPS, y mantendrán vigentes los beneficios y prestaciones de los trabajadores hasta que se negocie y apruebe por mayoría el nuevo contrato colectivo.

GM es el principal exportador de autos y la planta de Silao es más que simbólica porque el 95% de su producción de pick ups se exporta a Estados Unidos. Además de la planta de Silao, tendrá también votaciones en las plantas de San Luis Potosí, Guanajuato y Edomex.