Sector energético, foco de conflicto con Biden

El Premio Limón Agrio de la semana es para la secretaria de Energía, Rocío Nahle, por la escueta respuesta que a través de su cuenta de Twitter dio a la carta enviada el pasado lunes por los funcionarios estadunidenses Mike Pompeo, secretario de Estado; Dan Brouillette, de Energía, y Wilbur Ross, de Comercio, en la que manifiestan su preocupación por las medidas que está aplicando México en el sector energético, en especial por el bloqueo a permisos para proyectos privados que están en contra de lo negociado en el T-MEC y además afecta a cientos de millones de dólares de inversión que se han realizado en México a través de la International Development Finance Corporation; el EXIM Bank y el North American Development Bank y que son recursos públicos de Estados Unidos.

Nahle se limitó a contestar en su cuenta de Twitter, cuando la carta se hizo pública, que “la relación con Estados Unidos dentro del T-MEC en materia de energía es de respeto a las normas constitucionales de cada país, así quedó especificado en el tratado”.

Sin embargo, en la misiva, que no sólo fue enviada a Nahle, sino también al secretario de Relaciones Exteriores, Marcelo Ebrard, y a la de Economía, Tatiana Clouthier, los tres secretarios estadunidenses señalan que respetan el derecho soberano de México para determinar sus propias políticas energéticas, pero insisten en que México debe cumplir con sus obligaciones en el T-MEC y crear un atractivo ambiente de inversión respaldado por regulación no discriminatoria que impulse la autosuficiencia energética,

Tache también a Ebrard y Clouthier, que prefieren ignorar la carta quizá con el argumento de que es inminente el cambio de administración, pero deberían recordar que una de las prioridades de Biden es impulsar energías limpias y que Estados Unidos regrese de inmediato al Acuerdo de París. El sector energético —ni lo dude— será uno de los focos de conflicto en la relación bilateral.

• SORIANA, PRUEBAS RÁPIDAS COVID

El Premio Naranja Dulce es para Ricardo Martín Bringas, director general de Soriana, porque la empresa empezó a realizar pruebas rápidas de detección de covid-19 en dos de sus tiendas en la CDMX, en Pilares y Mixcoac, con la intención de ampliarla gradualmente.

En asociaciones con laboratorios certificados por Cofepris, se realizan pruebas PCR serológicas y de antígeno a un costo menor al de la mayoría de los laboratorios privados, con la notaria excepción de Salud Digna, la excelente empresa de Jesús Vizcarra.

La mayor participación de empresas en la detección de covid-19 ayudará, por simple competencia, a disminuir costos, a que las autoridades tengan mayor información sobre la gravedad de esta pandemia y, desde luego, a que los contagiados y sus familiares tomen medidas básicas de protección, como el aislamiento.

• VACUNAS, URGEN PARTICIPACIÓN DEL SECTOR PRIVADO

Además, Soriana puso a disposición de gobiernos  estatales y de la CDMX su cadena de suministro en frío y su red logística para la distribución de la vacuna y su cadena de 780 tiendas para la aplicación.

Desafortunadamente, el presidente López Obrador no permite que el sector privado participe en la distribución de las vacunas y son ya varias las empresas que, como Soriana, podrían apoyar al gobierno.