Samsung, desilusionado de Nuevo León, prefiere irse a Texas

Hace unos meses, autoridades de la compañía Samsung se reunieron con el gobernador de Nuevo León, Samuel García, y el secretario de Economía y Trabajo del estado, Iván Rivas Rodríguez, para proponerles la instalación de una fábrica de semiconductores en esta entidad del país. Vaya sorpresa que se llevaron los coreanos, al darse cuenta de que todo lo que presumían los mexicanos de tener todo listo para atraer inversión y relocalización de infraestructura al país desde 2021 era un cuento de hadas.

Luego de reuniones que tuvieron García y su gente en una gira que realizaron por Nueva York y Washington, donde entablaron pláticas con los principales fabricantes de semiconductores –Intel, Samsung, TSMC y HP– para informarles sobre las ventajas competitivas de instalar a su cadena de valor en la entidad, resultó que no hay un plan ni una estrategia digital para poder atraer la inversión, como sucedió anteriormente.

Samsung apostó a Nuevo León hace unos meses y se convencieron de llevar su nueva planta de semiconductores a este estado del norte de México, teniendo en cuenta el éxito que han tenido sus compatriotas de KIA. Sin embargo, luego de acercarse a las autoridades neoloneses para llegar a un acuerdo, Rivas Rodríguez se reunió con Samuel García para explicarle que no hay estrategias en la zona, no hay tanta agua y peor aún, la entidad aún no tiene planes de conectividad 5G ni agenda digital propia, que es lo más importante que solicitaban los coreanos para poder arrancar la construcción de su fábrica, valuada en alrededor de 30 mil millones de dólares.

Nuevo León, ya dejando de lado el problema de agua y la falta de una estrategia digital para sumar rápidamente conectividad y mejores empleos, no ha pensado en cómo atraer a las nuevas fábricas que están solicitando 5G para llegar, pues en el gobierno actual hay mucha estrategia de redes, pero nulo conocimiento de lo que hay detrás de internet y su futuro.

Me atrevería a decir que, inclusive, muchos estados del país no tienen este tipo de infraestructura, por lo que difícilmente llegará esta clase de inversión de las grandes tecnológicas que manufacturan este tipo de insumos, pues el mismo gobierno federal no da su brazo a torcer para bajar el costo del espectro radioeléctrico y masificar las redes de quinta generación.

Los negociadores de Samsung se desilusionaron de lo mal que está Nuevo León en este tipo de conectividad y agenda digital, y decidieron llevarse la construcción de su fábrica a Austin, Texas. Es una lástima que ni el país ni muchos estados del territorio nacional tengan una hoja de ruta para traer nuevas tecnologías y competir en el mundo. No queremos ser sólo un país de empaques para semiconductores, como terminaremos siendo si no hay avances en materia de adopción de 5G y, ahora, hasta de 5.5G. Va pa largo.

Back Door

Quien anda muy activo en los temas digitales y en todos los viajes a los que las empresas tecnológicas lo invitan es Javier López Casarín, el legislador del partido Verde Ecologista, quien además es el presidente de la Comisión de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Cámara de Diputados.

En las empresas saben que Casarín es el operador de Marcelo Ebrard en la Cámara de Diputados. Es ahora quien controla al Partido Verde. Los temas que le gustan son la innovación, tecnología y competitividad. El ahora también impulsor de la Ley Federal de Seguridad, tras el hackeo a Sedena, es traído arriba y abajo en varias partes del mundo por las empresas tecnológicas por el tema de Relaciones Exteriores y la presión norteamericana por el 5G, conectividad industrial, semiconductores y economía digital.

Estados Unidos ha estado invitando a México a los temas de fabricación de procesadores, economía digital e impulso a la masificación de 5G, y López Casarín es el operador de esos temas en el gobierno mexicano, pues quiere ser parte del próximo gabinete presidencial, sobre todo si Ebrard se queda al frente. Los chinos lo saben y no lo sueltan.