5 claves del acuerdo CFE

El acuerdo entre la CFE, Carso Energy y el consorcio Sempra, TC Energy e IMG, operadoras y constructoras de gasoductos es positivo considerando que la situación es binaria. En caso de que no alcanzaran un entendimiento, la señal sería pésima en materia jurídica en un sector clave como es el energético e igual de negativo sería que México tuviera limitantes para aprovechar que la vecindad con Estados Unidos le da al país una posición privilegiada para importar el gas más barato del mundo, clave en la generación eléctrica y como insumo competitivo para la industria. Tanto las empresas como el gobierno podrían haber optado por un largo y tortuoso camino jurídico en el que perderían ambos. No fue así afortunadamente.  

 
PRAGMATISMO Y DISCURSO

La narrativa política implicaba que en el acuerdo anterior habría habido abusos contractuales en contra de CFE, sin embargo, una y otra vez cuando se lo preguntaron a Carlos Slim y a Carlos Salazar, presidente del Consejo Coordinador Empresarial, ambos lo negaron categóricamente y ni el Presidente ni el director de la CFE mencionaron corrupción ni mucho menos. Ambas partes, tanto gobierno como empresarios, dieron muestras de un pragmatismo que sepultó una agenda poco constructiva.  

 
JIU JITSU EN LA CONFIANZA

Una de las partes más interesantes de la conferencia se dio cuando Carlos Slim hizo jiu jitsu discursivo al abordar el tema de la confianza y la inversión. Hasta ahora el argumento es que los empresarios requieren confianza para invertir, por ello es que cuando no se materializa la inversión se puede atribuir a falta de confianza, bajo esa lógica se han generado señalamientos de que el sector privado no cumple, dado que dice tener confianza pero no invierte. Carlos Slim se zafó de dicha lógica al afirmar: “el empresario invierte, no porque tenga poca o mucha confianza, sino porque tiene mucha o poca demanda; si hay demanda, pues invierte, si no es un tonto, va a perder sus actividades. Entonces, esa demanda se dará cuando con todas estas inversiones generen mucho empleo, mucha actividad económica, también va a fortalecer la demanda y va a jalar a que las empresas inviertan”.

 
¿SE LE MUEVE LA COLITA?

Hace unos meses Jorge Terrazas, de BBVA, le preguntó a Alfonso Romo, jefe de la oficina de la Presidencia, si se le movía una colita al Aeropuerto de Texcoco, la respuesta fue categóricamente negativa. Por eso me llamó la atención que ayer, cuando le preguntaron a Carlos Slim por Texcoco, contestó: “Eso ya lo dirá el futuro. No sé... pero es uno de mil 600 proyectos, claro, es un proyectote” la respuesta en donde puede haber un futuro y el verbo utilizado para referirse al proyecto de Texcoco estuvo conjugado en presente me hace pensar que todavía se le mueve la colita. Al menos si se atora Santa Lucía.

 
¿DÓNDE ESTÁ?

Un segundo aspecto notable de la conferencia matutina fue la ausencia de Alfonso Romo, que ha sido posicionado por el Presidente como el interlocutor clave con el sector privado, sin embargo, es de llamar la atención que en un tema tan significativo no haya estado presente en la conferencia de prensa.

TODOS GANARON

Es interesante observar la reacción al anuncio de la mañana de ayer, todas las audiencias refuerzan sus ideas con el mismo mensaje. Un fenómeno de comunicación de siempre, pero que hoy explica el intenso maniqueísmo del ambiente político.

Quiero felicitar a IZA Business Center, una historia que construyó Federico García y que hoy cumple un cuarto de siglo con 33 instalaciones de renta de espacios de oficina para apoyar a los empresarios, que vengan otros 25 más.