Foco amarillo automotriz

Si la economía mexicana fuera un coche, estaríamos viendo que se ha prendido el foco de falta de presión en las llantas, que metafóricamente sería la debilidad en el sector de la construcción. A dicho vehículo le quedaría un cuarto de gasolina en el tanque, que sería equivalente al consumo que da señales de debilidad. Al hipotético coche ahora se le prendió la alerta de cambio de aceite, que es la eventual debilidad del sector automotriz. En la primera mitad del año las ventas de automóviles nuevos en México cayeron 6.4 por ciento y la tasa descendente acelera conforme avanza el año.

EL MOTOR

Las ventas nacionales representan 32 por ciento de la producción de vehículos nuevos y el resto es de exportación. Los datos de la primera mitad de 2019 muestran que 78 por ciento de las exportaciones se fueron a Estados Unidos con un millón 370 mil vehículos, lo que significó un avance de 13 por ciento en comparación anual. El segundo mercado de exportación es Canadá, que representa apenas el 7 por ciento del total y que tuvo una caída anual de 6 por ciento. El tercer mercado es Alemania, que representa 4 por ciento y que tuvo un desplome de 29 por ciento anual. Las cifras hacen evidente que somos totalmente dependientes del mercado de Estados Unidos y que no es muy realista pensar en diversificar a otros mercados, de ahí que una desaceleración en la venta de autos nuevos en dicho mercado afecte inmediatamente a México. El tema es importante para el conjunto de la economía, dado que las manufacturas representan el mayor componente de la economía con 18 por ciento del PIB y el componente más importante de las mismas es el automotriz.

FOCO AMARILLO

Hasta ahora, la economía estadunidense ha gozado de buena salud, pero en la primera mitad del año, las ventas de vehículos nuevos ha mostrado signos de debilidad y se proyecta que se venderán por primera vez desde 2014 menos de 17 millones de unidades. Aun con debilidad en las ventas, el crecimiento de las exportaciones mexicanas está impulsado por las Sport Utility Vehicles (SUV), que se están aglutinando en Estados Unidos y que incluso han crecido en ventas 1.6% a pesar de que lo demás retrocede. El vehículo que más exporta México es la Silverado 2500 doble cabina de GM con 105 mil 957 unidades, a pesar de ello se exportó 15% menos que el año pasado. En segundo lugar se exportaron las Tiguan de Volkswagen con 105 mil 112 unidades, en este caso las exportaciones crecieron 365%, gracias a que se quintuplicaron los envíos a la Unión Americana así como Canadá y se triplicaron a Alemania. Otra SUV muy popular es la Equinox de GM, de dicho modelo se vendieron 11 por ciento más, casi todas ellas a Estados Unidos, y una más es la RAM 2500 con 92 mil 328 unidades, así como la Compass con 98 mil vehículos.

TENDENCIAS

Hay dos tendencias que pueden afectar al sector automotriz mexicano de exportación, la primera es la posibilidad de que Estados Unidos entre en recesión, lo que automáticamente implicaría menores ventas de vehículos. La segunda es que el creciente auge de SUV’s se dé en detrimento de los vehículos sedán en los que México está más especializado. Un tercer elemento son las amenazas de Donald Trump en materia de aranceles y que aplique la Sección 232, que implica considerar que la importación de vehículos es una amenaza a la seguridad nacional. En este contexto, México no se puede dar el lujo de debilitar a la industria permitiendo la entrada de autos usados ilegales, dado que eso repercute directamente en las ventas y, por lo tanto, en la producción.