La pandemia va a continuar

La jefa de Gobierno de la Ciudad de México anunció el semáforo amarillo epidemiológico en la capital, aunque hace varios meses que los chilangos nos pasamos la luz roja y naranja en la contensión de covid-19. Y es que las calles y los centros comerciales dan cuenta de que muchos han decidido regresar a su vida cotidiana sin tomar en cuenta la pandemia. No es sorprendente que cuando le preguntaron a Claudia Sheinbaum que a qué se debe que disminuyan los contagios contestara que no se sabe.

Lo cierto es que México ha tenido suerte en 2021 de que no haya ocurrido un resurgimiento por las nuevas variantes, como ya se ha observado en la India, en Brasil y a finales del año pasado en Reino Unido. Más allá de la suerte de México, es obvio que la pandemia no ha terminado y que sigue habiendo un riesgo importante, como lo demuestra la India que, en un inicio, tuvo éxito en contener los contagios, pero que relajó las medidas de confinamiento, apostando a su éxito previo, lo que arrojó un desastre de grandes proporciones.

El matrimonio del Premio Nobel de Economía 2019, Abhijit Banerjee y Esther Duflo, publicó un artículo titulado: El problema de covid de la India ahora es un problema del mundo, en el que describen las condiciones que permitieron el brote en ese país, pero, sobre todo, la tardanza en la respuesta internacional, lo que ha agravado el problema y, al mismo tiempo, entraña riesgos para el resto del mundo. Uno de los signos de interrogación que plantean los economistas es: ¿Qué tan severa es la variante de la India? Ya que hay reportes de 37 doctores infectados en un hospital de Delhi a pesar de que ya habían sido vacunados.

PLACEBO ESTADUNIDENSE

En esta semana que termina, el gobierno de Estados Unidos dio el paso inédito de anunciar que está listo para comenzar la discusión de una exención de patentes de la vacuna en contra del SARS-CoV-2 con el objetivo de que más países puedan tener acceso. Sin embargo, ese no es el problema ya que, como lo dijo Stéphane Bancel, presidente ejecutivo de la farmacéutica Moderna, una de las dos pioneras en la tecnología de ARN mensajero, el cuello de botella radica en la capacidad para fabricar el fármaco, lo cual requiere de inversión en las instalaciones ya existentes, pues aunque se invirtiera en poner fábricas en países necesitados, no habría suficiente personal capacitado y de todas formas no se resolvería el problema de la escasez de insumos.

En un blog aparecido en la revista Science Magazine, Derek Lowe, un científico veterano en el descubrimiento de medicamentos, concluye que el anuncio de la Unión Americana es más bien un tema de relaciones públicas que no va a lograr el objetivo de una distribución más amplia de las vacunas.

EL NEGOCIO

¿Qué tan buen negocio han sido las vacunas? La respuesta es: depende a quién le preguntes. Hay empresas como GSK o Merck, de Estados Unidos, que a pesar de ser expertas en vacunas e invertir en ello no tuvieron éxito. Otras, como Johnson & Johnson, que no ha estado exenta de algunos problemas, en el primer trimestre del año reportó ingresos por concepto de vacunas contra covid-19 de 100 millones de dólares, mientras que los de AstraZeneca fueron de 275 millones de dólares. Pfizer logró ventas enormes, de 3,462 millones de dólares, y Moderna de 1,700 millones de dólares. El conjunto de los ingresos visibles, porque no es público lo que ganó el gobierno ruso con la Sputnik V y tampoco los ingresos de los laboratorios chinos, es inferior al impacto económico de no tener controlada la pandemia.

En conclusión, México debería mantenerse cauteloso y ayudarse del sector privado para acelerar el proceso de vacunación, así podríamos dejar de depender de la suerte porque la pandemia va a continuar en el futuro previsible.