Contar con un ahorro es de gran utilidad ya que puede ayudarnos a enfrentar alguna emergencia, costear un viaje, etc., sin embargo, tener este hábito no es nada fácil debido a los gastos hormiga.
Los gastos hormiga son aquellos que se hacen en pequeñas cantidades, pero a corto o mediano plazo terminan dañando nuestras finanzas personales.
Muchas personas destinan una parte de sus ingresos para comprar cafés, chicles, cigarros, refrescos, servicios de streaming, etc., pero no le vendría mal a nadie hacer de los gastos hormiga un ahorro hormiga.
Un ahorro hormiga consistiría en guardar pequeñas cantidades de dinero, pero para cumplir con tus metas financieras es necesario que seas constante, disciplinado y, sobre todo, que tengas un plan de ahorro.
Elimina los gastos hormiga
Lo primero que debes hacer es eliminar los gastos hormiga para convertirlos en ahorro hormiga.
Para ello, será necesario que te cuestiones si realmente necesitas dicho producto o servicio, después deberás considerar si cuentas con el dinero suficiente para hacer el gasto.
La Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) recomienda un presupuesto de ingresos y gastos para que los gastos hormiga no se conviertan en un problema.
En el presupuesto que elabores debes dividir tus gastos en fijos y variable.
- En los gastos fijos considera los alimentos, vivienda, servicios y transporte
- En los gastos variables toma en cuenta el calzado, vestimenta, cuidado del hogar y personal, servicios de comunicación y diversión
Una vez que hayas hecho el presupuesto, analiza qué gastos puedes recortar.
Recortar gastos innecesarios te permitirá guardar en una alcancía el dinero que te sobre, así acabarás con los gastos hormiga y lo convertirás en una ahorro hormiga, el cual beneficiará a tus finanzas personales.