David Páramo

Análisis superior

David Páramo

14 Dic, 2010

No despegará

Digan los que digan PC Capital que lleva Arturo Barahona no tiene dinero para hacer que Mexicana de Aviación recupere el vuelo y son promesas tan vanas el que comenzarán a volar a medidos de enero como que se cumplirá el nuevo Contrato Colectivo de Trabajo con un porcentaje muy pequeño de los trabajadores que mantendrán su fuente de empleo.

El tiempo se encargará de demostrar que lo dicho en esta columna está apegado a la realidad. Mexicana de Aviación no tiene un camino diferente al de reconocer que su destino es la quiebra.

Barahona y los que están atrás de él, escondidos, no tienen capital para levantar la empresa y están teniendo gravísimos problemas para conseguir nuevos accionistas.

RENOMBRADOS

Guillermo Zamarripa, quien ahora es presidente de la Fundef que tiene su sede en el ITAM, tiene muy claro que se tienen que resolver algunas preguntas fundamentales en torno al sector financiero.

Si bien es cierto que será hasta enero cuando presentará a su Junta de Gobierno (integrada por algunos de los economistas más importantes del país), la realidad es que este hombre tiene claro que su fundación debe concentrarse en responder una pregunta fundamental: ¿Por qué es tan baja la penetración del sistema financiero en México?

Durante décadas se han repetido una y otra vez las mismas respuestas en torno al bajo ahorro, la escasa penetración del seguro, la falta de bancarización, el mínimo tamaño de la Bolsa Mexicana de Valores (BMV). Esto sólo puede significar que se están dando respuestas francamente equivocadas y que, por lo tanto, esta fundación debe comenzar a plantear las preguntas desde otro punto de vista no sólo para dar respuestas diferentes sino ser un órgano que genere un debate mucho más informado dentro del sector financiero con base en premisas serias y no en la repetición de mitos sólo porque suenan bien en la cabeza de algunos.

Habrá que seguir con mucho cuidado el desarrollo de Fundef puesto que su éxito será, sin lugar a dudas, una aportación fundamental para lograr un México más próspero.

Uno de los gravísimos problemas que enfrenta la población ante el crecimiento de las ciudades es que se rompen parámetros de seguridad con gran facilidad. A pesar de que hay un decreto que tiene más de 20 años en el cual se ordena a las gaseras salir de San Juanico, no sólo no se ha cumplido sino que ahora la situación se vuelve más compleja puesto que una inmobiliaria está construyendo Hacienda San José, un complejo de mil departamentos dentro del político de seguridad. La realidad, pura y llana es que muy pronto podría vivirse una situación similar a la de aquella tragedia que no sólo enlutó al Estado de México sino una buena parte del país.

Mientras que algunos esperan que la COP 16 o cualquier otra reunión de jefes de estado traiga soluciones en cuanto al cuidado del medio ambiente, la realidad es que debe tratarse de un trabajo en el cual las personas hagan lo que le tocan y elijan aquellos productos que son mejores con el medio ambiente.

En la compra de pinturas para hogar, por ejemplo es preferible comprar aquellas marcas que se están esforzando por cuidar el entorno. Para las empresas también se convierte en un distintivo. Sherwin Williams, que en México dirige Pablo García Casas, basó gran parte de su estrategia para este año en vender productos especialmente para la arquitectura que son amigables con el ambiente.

Bruno Ferrari nuevamente está mostrando su baja capacidad como secretario de Economía. Los productores de tortillas de nixtamal anunciaron, en bloque, que realizarían aumentos de precio y la reacción de esta autoridad ha sido llamarlos a cuentas bajo la amenaza de que evitarán el alza de precios.

Seamos claros, desde hace ya muchísimos años el precio de las tortillas dejó de estar bajo el control del gobierno (como es el precio de la gasolina) y por lo tanto la Secretaría de Economía no tiene facultades para tomar acciones de este tipo.

Posiblemente, sí se podría realizar una investigación por parte de la Comisión Federal de Competencia, que lleva Eduardo Pérez Motta, si realmente hubiera una colusión para aumentar precios; sin embargo, la dependencia que encabeza Ferrari no tiene facultad para fijar los precios.

Más allá, se está cometiendo un error gravísimo en cuanto al enfrentamiento de la situación. La competencia es el mejor regulador de los precios. En la pasada crisis de aumento de la tortilla el gobierno reaccionó de una manera adecuada al promover que los miembros de la ANTAD no sólo mantuvieran el precio de las tortillas hechas con harina de maíz sino que además lo disminuyeron.

El gobierno puede impulsar medidas a favor de la competencia pero de ninguna manera puede establecer topes. Las consecuencias de hacerlo serían francamente ruinosas.