Patadas debajo de los banqueros

Ignacio Deschamps y Luis Robles, dirigentes tanto del BBVA Bancomer como de la Asociación de Bancos de México, lograron contener las disputas entre el gremio y consolidar la unión de la asociación… hasta el día de hoy.

La sucesión por la presidencia del gremio bancario se adelantó de manera dramática. Debía ser hasta el 23 de febrero, día en el cual se va a reunir el Comité de Asociados conformado por 41 bancos para dar pie a la Convención Bancaria a inicios de abril. Y en los últimos días todo se adelantó con dos posturas que parecen totalmente opuestas.

Luis Peña, el favorito

Una de las posturas es la de los banqueros a favor de Luis Peña, director del Grupo Financiero HSBC, quien siempre ha sido un innovador en el mercado mexicano. Ha lanzado varios productos de ahorro y de inversión novedosos.

Peña tiene el aval de varios bancos grandes e intermedios. Es su candidato natural. Desde hace años se le mencionó como posible presidente de la Asociación de Bancos de México, primero al ser director de Banorte, y después ya bajo el mando de HSBC.

Banorte piensa distinto

Precisamente aquí surgen las diferencias. Banorte no está de acuerdo en que sea Peña.

Para algunos es una rencilla laboral porque Peña fue director del banco. Pero para otros Roberto González Barrera, presidente vitalicio de Banorte, está muy lejos de la sucesión de la ABM: está pensando en la fusión con Ixe, la presencia en EU y la globalización.

Sin embargo, Guillermo Ortiz, ex gobernador de Banxico y hoy presidente ejecutivo, así como Alejandro Valenzuela, director del banco, traen la propia postura de Banorte. La idea es honrar un pacto entre caballeros que hubo hace dos años en la ABM para no dividir el gremio entre los bancos con capital de control mexicano y con capital de control en manos extranjeras.

Unifim viva: control de mexicanos

Fue hace dos años cuando la Asociación de Bancos de México estuvo a punto de la división, sobre todo con la creación de la Unifim, la Unión de Instituciones Financieras Mexicanas, que en sus propios estatutos señala  pertenecer sólo a financieras con capital controlado por mexicanos.

La Unifim todavía sigue viva, bajo la dirección de Adalberto Palma, quien fuera el polémico vocal del IPAB, y se ha centrado en el tema de gobiernos corporativos y control de instituciones en manos de inversionistas mexicanos.

En 2008 dentro de la ABM se vivió la rebelión de los bancos bajo control de inversionistas mexicanos impulsada por Banco Azteca, Banorte y algunos otros que no la vieron con malos ojos, como Inbursa o Ixe.

Deschamps y Robles: operación cicatriz

En aquel entonces, Ignacio Deschamps y Luis Robles, ambos de Bancomer y con buen tacto, hicieron la operación cicatriz. Ya como dirigentes de la ABM, los de Bancomer inmediatamente englobaron, unieron, escucharon.

Fue cuando surgió una vicepresidencia para uno de los bancos controlado por mexicanos, como fue la vicepresidencia de Luis Niño de Rivera , presidente ejecutivo de Banco Azteca.

Vicepresidencias por tamaño no origen de capital

Ahora que es la sucesión en la Asociación de Bancos de México, enfatizan que las vicepresidencias jamás se han dado por el origen del capital, sea mexicano o extranjero. Se han otorgado por el tamaño de los bancos.

Por ello una vicepresidencia fue para bancos grandes quedando en manos de Enrique Zorrilla, director de Banamex. La otra para bancos medianos quedando en manos de Luis Peña, ahora director de HSBC. Y la otra para bancos pequeños donde quedó Luis Niño de Rivera de Banco Azteca.

Dos años de agenda: crédito y relacionados

A lo largo de los últimos dos años han pasado varios temas, y uno principal: la reapertura del crédito bancario con mayor facilidad. La banca está volviendo a prestar, y de hecho debe ser un puntal del crecimiento para llevar el ahorro a la inversión a través de los créditos.  La gestión de Deschamps y Robles buscó atender temas cruciales para los bancos controlados por inversionistas mexicanos, como el de los créditos relacionados, que por cierto todavía no salen sus reglas. De hecho buscaron atender a los distintos agremiados.

Sin embargo, a finales de su gestión y antes de tiempo las aguas se mueven. Vuelve a surgir el fantasma, el origen del capital en la banca.

Consenso en ABM, o voto por voto

De hecho los bancos con capital mayoritario en manos mexicanas ya tienen su candidato: Jaime Ruiz Sacristán, ex director de Bital y hoy dirigente de Ve por más, el banco donde está Antonio del Valle hijo.

Ruiz Sacristán y Luis Peña van por la presidencia de la Asociación de Bancos de México.

Aquí Peña tiene mayor presencia en innovación, pero Ruiz Sacristán trae el apoyo de los bancos de capital de control mexicano. Se buscará el consenso, y si no lo hay… se contará voto por voto de los 41 agremiados.