Marco Gonsen

Memoria Flash

Marco Gonsen

5 Dic, 2011

Granjas

Una brutal sequía, quizá la más fuerte que se recuerde en muchos años, producto de condiciones meteorológicas atípicas y adversas, ha sido la nota al comenzar diciembre. Aun así, hay quienes ven en el cierre del año la oportunidad para cosechar el éxito sembrado en años pasados en un entorno de crecimiento moderado e incertidumbre. Apuestan con mesura, a tono con el clima invernal.

En efecto, no ha sido el mejor año para el sector tecnológico, particularmente en lo referente a web. Una primera explicación genérica apunta al tsunami que azotó Japón en marzo, afectando la cadena de producción y suministro de aparatos y gadgets. Y, desde luego, a esto se suman las ya archiconocidas dificultades financieras que tienen con el agua al cuello a Europa y aún agobian a Estados Unidos. Se entiende así que, al menos en lo que se refiere al ámbito bursátil, la inversión en cibernética haya sido uno de los rubros de peor desempeño en el año, a pesar de su intenso movimiento.

Un reporte de la consultora Ipreo, citado por el medio digital The Daily, de Rupert Murdoch, consigna que 26 de las 116 empresas que salieron a Bolsa en Estados Unidos pertenecen al área de tecnología. Seis de ellas aparecen en el Top ten, que lidera una compañía de salud. Sin embargo, las acciones de las firmas cuya base de acción está fundamentalmente en internet han perdido en promedio casi 20% de su valor desde que incursionaron en el mercado accionario.

Un ejemplo del zigzagueante comportamiento de las compañías en línea que han abierto su juego es LinkedIn, cuyas acciones, según la nota de The Daily, se dispararon en su precio más de 100 por ciento el día de su apertura en mayo, enfriándose paulatinamente desde entonces. Más dramático es el caso de Groupon, portal de ofertas en cupones que salió al mercado accionario apenas en noviembre, con un alza en sus títulos mayor de 50%, y que en menos de un mes registró caídas dramáticas hasta casi llegar al valor con el que debutó. Pandora Media, la popular estación de música por internet, tampoco ha cantado mal las rancheras en esta ola.

Este escenario, sin embargo, no desanimó a la desarrolladora de juegos on-line Zynga a lanzar hoy lunes una oferta pública inicial que, de confirmarse lo publicado la semana pasada por The New York Times y otros medios estadunidenses, será la mayor del año de una compañía de internet, al poner a disposición de los compradores 14.3% de sus acciones, un equivalente a 100 millones de dólares.

Nada mal para una compañía cuyo principal cultivo ha provocado una poderosa adicción: la de más de 250 millones de usuarios de Facebook que cotidianamente despliegan sus habilidades lúdicas, de los cuales al menos 50 millones lo hacen activamente en Farmville, una simulación de vida rural que —ya sea en la red social o en aplicaciones móviles— encontró la fórmula para obtener dinero real en un entorno virtual (un modelo que, por ejemplo, aún no han encontrado las empresas de información y de noticias, a pesar de ofrecer esquemas de suscripción a precios bastante asequibles). Se trata de una estrategia que permite jugar gratuitamente pero con la posibilidad de adquirir elementos virtuales (items) que hacen más placentera la experiencia. Una táctica exitosa que replicó Angry Birds, cuya Mighty Eagle pone al servicio de jugadores desesperados un arma poderosa a cambio de sólo un dólar.

Zynga, compañía fundada en 2007 por Mark Pincus, ha optado por una saludable cautela. Previo a su inminente salida a bolsa, recortó el valor de su empresa en más de 30 por ciento, de 14 mil 500 a nueve mil 40 millones de dólares, con el fin de atajar el fantasma de una nueva “burbuja punto com”, como la que arruinó la cosecha a finales del siglo pasado. La suerte que corran sus hortalizas y ganado en el Nasdaq será un anticipo de lo que ocurra con Facebook y Twitter, de las que aún está por verse si su auge virtual es compatible con la economía real. Se verá si detrás de sus tan abultadas expectativas existe un poderoso tractor o tan sólo una escuálida yunta.

marco.gonsen@nuevoexcelsior.com.mx