Buscan quitar topes fronterizos

CIUDAD DE MÉXICO, 8 de julio.- Los gobiernos de Estados Unidos y México negocian fórmulas, incluso a manera de propuestas y ni siquiera de acuerdos, con los que se pudiera eliminar de la agenda el incumplimiento de la Unión Americana con la apertura de fronteras al autotransporte comprometida en el  Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN) y, con ello, eliminar una barrera que impide que los estadunidenses avancen en sus negociaciones del Acuerdo de Asociación Transpacífica (PTT, por sus siglas en inglés) y con Europa.

El secretario de Comunicaciones y Transportes, Gerardo Ruiz Esparza, dijo a Excélsior que se buscan fórmulas de pre-certificación para lograr que las mercancías puedan pasar con rapidez y ya no se detengan en la frontera, además de que el tránsito por ferrocarril sea más rápido y que se establezcan corredores económicos (exprés) de flujo rápido.

Sin embargo, dijo, que no se puede dar acatamiento al TLCAN debido a que hay camiones que no cumplen con certificaciones ambientales y de seguridad, además de que no es por la vía de las demandas en organismos internacionales la solución. “Lo que debemos hacer es ver cómo pasar más rápido y no quién gane un juicio”, dijo.

Refirió que ante dicho freno  existe una  demanda internacional que los transportistas mexicanos mantienen ante organismos internacionales, por daños y perjuicio por seis mil millones de dólares, en contra del incumplimiento de Estados Unidos con la apertura comprometida en el TLCAN.

Desde el punto de vista de los agremiados a la Canacar y al Consejo Mexicano del Transporte, en primer lugar, las negociaciones deberán ser aceptadas por ambos gobiernos y por los transportistas de los dos países giran en torno a establecer estaciones de tránsito rápido y a llegar a un acuerdo económico directo para compensar por daños y perjuicios a la industria mexicana, con lo que se neutralizaría la demanda interpuesta por los transportistas mexicanos en contra del gobierno de EU por incumplimiento del TLCAN.

José Refugio Muñoz, director de la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar), comentó que se espera que en los próximos días la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) y de la Secretaría de Economía (SE) convoquen a la industria mexicana para hacer el planteamiento formal.

Explicó que por pláticas con sus contrapartes de los Estados Unidos y versiones aún no oficiales se sabe que las propuestas giran en torno de dos factores: la instalación de estaciones de transferencia en la frontera norte complementado con los corredores exprés; además de encontrar mecanismos para compensar a los transportistas mexicanos por los daños y perjuicios ocasionados.

Expertos del Consejo Mexicano del Transporte dijeron que las estaciones de transferencia, no serían otra cosa que espacios a los que los transportistas mexicanos podrían llegar para dejar su remolque en manos de un transportista de EU para continuar la ruta hacia territorio estadunidense y viceversa.

Proceso y negociación

A julio de 2012 únicamente cuatro empresas mexicanas se habían sumado al Programa de Transporte Transfronterizo que se acordó con la Unión Americana, aunque había 20 compañías que habían solicitado su inclusión en el programa.

Ambos gobiernos determinaron por la vía de la negociación un nuevo programa piloto que, una vez más ha fracasado, por lo que en enero de 2013 GerardoRuiz Esparza, sostuvo una reunión con el embajador de Estados Unidos en México, Earl Anthony Wayne y otros funcionarios de la embajada, con quienes abordó temas sobre telecomunicaciones, transporte, aviación y ferrocarriles.

En marzo de 2013, la SCT aseguró que el gobierno mexicano alcanzó avances importantes con EU en temas fundamentales como el transporte de carga transfronterizo, aviación civil y la posible construcción de infraestructura en la frontera.