Sigue la dependencia petrolera

CIUDAD DE MÉXICO, 7 de agosto.- México ha tratado desde hace varios años de dejar de depender de los ingresos petroleros, lo que se ha llamado despetrolización de las finanzas públicas, pero aún no lo ha logrado, haciendo vulerable a la economía.

En 2012 las participaciones de este sector contribuyeron con un billón 183 mil 895 millones de pesos, equivalentes a 33.7 por ciento del total del presupuesto, que fue de tres billones 514 mil 530 millones de pesos, según cifras oficiales, las cuales indican que dicha proporción fue igual a la de 2011 y la más alta desde 2006, cuando alcanzaron un máximo histórico de 38 por ciento.

 Los expertos advierten que pese a la disminución observada, el grado de dependencia que mantienen las finanzas públicas respecto a los ingresos petroleros es elevado y riesgoso en el contexto actual.

Por su parte, Petróleos Mexicanos (Pemex) ha invertido un promedio anual de 21 mil 470 millones de dólares en el periodo de 2010 a 2012, por encima de la mayoría de las petroleras estatales latinoamericanas, pero aún por debajo de Petrobras.

De acuerdo con un comparativo realizado por este medio, en el mismo periodo la brasileña destinó un promedio de 33 mil 600 millones de dólares anualmente.

Despetrolización, el reto

Pese al esfuerzo realizado por las últimas administraciones para reducir la participación de los ingresos petroleros respecto al total, a lo que se le ha llamado despetrolización de las finanzas públicas, todavía tienen una alta incidencia en éstas, lo que las hace vulnerables.

En 2012, los ingresos petroleros contribuyeron con un billón 183 mil 895 millones de pesos, equivalentes a 33.7 por ciento del total presupuestado, que fue de tres billones 514 mil 530 millones, según cifras de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), que indican que dicha proporción fue igual que la de 2011 y la más alta desde 2006, cuando alcanzaron un máximo histórico de 38 por ciento.

Los expertos advierten que pese a la disminución observada, el grado de dependencia que mantienen las finanzas públicas respecto a los ingresos petroleros es elevado y riesgoso ante la apreciación del tipo de cambio, una caída del precio de exportación, la disminución de la plataforma de producción y el agotamiento de las reservas de crudo del país.

Advierten que aun cuando el precio de exportación está protegido por coberturas contratadas por el gobierno federal, cuando se presenta uno o varios de los factores de riesgo mencionados, los ingresos petroleros caen en comparación con los recibidos en periodos anteriores y esto afecta la recaudación federal participable y las participaciones y aportaciones federales a estados, entre otros rubros.

Riesgos

Según cifras de la SHCP, en el primer semestre de 2013 los ingresos petroleros se ubicaron en 580 mil 910 millones de pesos y resultaron inferiores en 5.6 por ciento anual en términos reales.

Dicha caída resultó del menor precio de exportación de la mezcla mexicana de petróleo, el cual disminuyó siete por ciento durante el periodo, así como de una reducción de la plataforma de producción de crudo, la cual bajo 0.3 por ciento, y de la apreciación del tipo de cambio, que subió 8.8 por ciento, explicó la dependencia.

Sin embargo, a todo lo anterior hay que sumar el llamado IEPS negativo, mejor conocido como subsidio a las gasolinas, que durante los primeros seis meses del año totalizó 64 mil 422 millones de pesos.

Como consecuencia de todo lo anterior, en el primer semestre de 2013, la recaudación federal participable a estados, que se integra con ingresos petroleros y tributarios y es la base para el pago de participaciones federales a las entidades federativas, totalizó un billón 84 mil 619.1 millones de pesos, cantidad inferior en 48 mil 38.3 millones de pesos respecto a lo programado para el periodo enero junio de este año.

Reforma de fondo

Los expertos confían en que el presidente Enrique Peña Nieto presentará una iniciativa de reforma profunda, que transforme de fondo el sector energético y siente las bases para despetrolizar las finanzas públicas y reducir su vulnerabilidad ante episodios de volatilidad.

“Las finanzas del gobierno federal dependen en una porción muy importante, arriba de la tercera parte, de los ingresos petroleros”, dijo Leticia Armenta Fraire, directora del Centro de Análisis Económico del Tecnológico de Monterrey, Campus Ciudad de México.

En entrevista con Excélsior, comentó que la reforma que presentará Peña Nieto debe ser amplia, lo que significa transformar también a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), no solamente a Pemex, las cuales dijo, deben abrirse a alianzas con otras empresas de su tipo y a la
inversión privada.

“El objetivo final, lo que la sociedad necesita, es tener energía suficiente a menor costo, es decir, comparable a la que tienen nuestros socios comerciales y con un bajo contenido de contaminación, es decir, una energía lo más limpia posible”, afirmó.

Explotación, a tiempo

La explotación de los hidrocarburos del país no significa afectación de generaciones futuras, por lo que deben ser monetizados pronto para de esta forma acelerar el desarrollo del país, afirmó el Consejo Mexicano de Asuntos Internacionales (Comexi).

En el estudio México ante la Revolución Energética, dijo que la segunda premisa falsa en relación con una política agresiva de explotación es que se debilita a Pemex.

Andrés Rozental, presidente fundador de Comexi, advirtió que el gobierno debe ser cuidadoso de conducir el debate de la reforma.

“El debate que se da de que no hay que sacar el petróleo porque tendrá más valor mañana es falso, está comprobado que el precio del petróleo está hoy por encima de lo que estará en el futuro y lo más probable es que si se da la reforma energética se puedan encontrar más recursos”, señaló.

Al respecto, Mario Gabriel Budebo, analista de la firma México Infraestructura, advirtió que la Reforma debe evitar que el dinero que genere la industria petrolera se utilice para solventar gasto corriente.

Dijo que se tiene que asegurar que esos recursos se vayan al desarrollo de infraestructura y de capital humano.

Efectos

1.- Al estar sujeta a la exportación petrolera, la economía mexicana está sujeta a riesgos como la caída en los precios internacionales, altibajos en el tipo de cambio y la caída en la producción y exportación.

2.- La gran dependencia de los ingresos de Pemex restan competitividad tanto a la petrolera como al país, pues la mayor parte de sus ingresos se destinan a gasto corriente, en lugar de a proyectos productivos.

Inversión de Pemex, arriba de la media

Petróleos Mexicanos (Pemex) invirtió un promedio anual de 21 mil 470 millones de dólares en el periodo de 2010 a 2012, por encima de la mayoría de las petroleras estatales latinoamericanas, pero aún por debajo de Petrobras.

De acuerdo con un comparativo realizado por este medio, en el mismo periodo la brasileña destinó un promedio de 33 mil 600 millones anualmente.

Sin embargo, Pemex invierte por encima de la noruega Statoil, que destinó 18 mil 430 millones de dólares anualmente en el último trienio, aunque es de contextualizar que la petrolera europea produce 1.8 millones de barriles de petróleo al día, mientras que Pemex alcanza 2.5 millones.

Petróleos de Venezuela (PDVSA) es otro caso que se ve superado por la paraestatal mexicana, con un promedio anual de 18 mil 430 millones; mientras que la colombiana Ecopetrol destinó seis mil 600 millones de dólares anualmente de 2010 a 2012.

Para este año, Pemex, que dirige Emilio Lozoya, tiene programada una inversión de 25 mil 300 millones de dólares. Esto significa que se invertirán  cuatro veces más de los siete mil 500 millones que se destinaron en 2000; sin embargo, no es suficiente.

“Pemex está invirtiendo cuantiosísimos recursos ahora comparado con lo que acostumbraba”, comentó Ernesto Marcos, analista del sector petrolero.

“Las inversión de poco más de 25 mil mdd es más de doble del promedio de 2000 a 2012; se incrementó cuatro veces desde el principio de siglo y todo con base en deuda, tiene capital negativo y no capta”, añadió el ex director corporativo de
Finanzas de Pemex.

Capacidad de financiamiento

Marcos aseguró que antes de abrir el sector a la competencia es necesario que se le confieran a la petrolera mayores capacidades para hacerse de recursos.

“Es importante que en el ámbito de competencia tenga posibilidades de levantar capital para sustentar mayores inversiones. Con un nuevo régimen para que tenga autonomía financiera”, comentó Marcos.

Sin embargo, reconoció que, aunque Pemex invierta a su máxima capacidad en los próximos años,  “la riqueza de este país es mucho mayor y no la va a poder explotar en un corto plazo”.

Por ejemplo, el desarrollo de un solo pozo en aguas profundas del Golfo de México tiene un costo aproximado de cinco mil millones de dólares, es decir, que con el presupuesto de Pemex de un solo año se podrían hacer sólo cinco.

Los inversionistas necesitan certeza

Para que la reforma energética sea un éxito deberá cumplir con varias condiciones mínimas, entre las que destacan modificaciones constitucionales para garantizar la participación de la inversión privada del exterior en el sector, aseguro en entrevista Duncan Wood.

El director del Instituto México del Centro de Investigaciones Woodrow Wilson, detalló que se debe reformar el sistema de hidrocarburos en México para que Pemex pueda entrar en joint ventures (empresas conjuntas) con el sector privado nacional y extranjero, para que pueda beneficiarse de su tecnología y conocimientos, sobre todo en aguas profundas y en campos complejos.

“Estas reformas necesitan un cambio constitucional para que las empresas tengan certeza jurídica, ninguna empresa va a querer invertir en el sector si no hay un cambio constitucional que garantice sus derechos”, abundó.

Precisó que otra condición que tiene que contener la reforma es que se debe permitir a las empresas contabilizar las reservas; si las empresas no tienen esta posibilidad, no les interesará la reforma, advirtió.

Requisitos

Wood afirmó que Pemex necesita más autonomía en la toma de decisiones y mantener el control de sus ingresos para invertir más en su empresa.

“Una parte muy importante deberá ser la transformación de Pemex en una empresa pública lucrativa, que el gobierno ya dijo que lo intentará”, enfatizó.

Expuso que otro elemento que debe contener la reforma es la creación de un órgano regulador que tenga la capacidad y la fuerza para garantizar un campo de juego nivelado.

Consulte:

PRI, por reforma a la Constitución