Por productos equivocados fracasan el 80% de las nuevas empresas

Ciudad de México.- De acuerdo con la empresa RedBox, en nuestro país, el 80% de los nuevos negocios fracasa antes de los dos primeros años de operación. La falla principal es que los consumidores no desean el producto o servicio, o no los desea.

Carlos Álvarez, director creativo de la única firma de innovación en México, destacó que la mayoría de las nuevas empresas enfrenta el reto de que sus productos o servicios sean del gusto de la gente y, por ende, el negocio prospere.

La forma tradicional de minimizar el riesgo al fracaso es preguntando a los clientes potenciales qué opinan sobre la idea de negocio; sin embargo, preguntar no siempre funciona, pues la gente no necesariamente sabe lo que necesita, resaltó en un análisis.

Recordó una máxima de Henry Ford, fundador de Ford Motor Company, quien alguna vez dijo: "Si le hubiera preguntado a mis clientes qué es lo que necesitaban, me hubieran dicho que un caballo más rápido".

Y es que si quieres saber si tu idea es buena, evita preguntar a la gente, porque su opinión podría nulificar un proyecto que sí debiera ser lanzado al mercado, destacó.

Para evitar esto, dijo, RedBox puso en marcha un proceso en donde se genera una serie de pasos para llevar la idea a la realidad de forma gradual, que en una primera fase implica crear un prototipo para llevar la idea a la realidad –al terreno tangible– de forma gradual.

Explicó que el pretotipado antecede a un prototipo. Es una técnica más rápida y económica que trata sólo de responder una pregunta: ¿Estamos construyendo la idea de negocio correcta?

El pretotipo es una primera versión “casera” del producto o servicio. En ese sentido, recordó que la Palm nació de esa manera, cuando Jeff Hawkins cortó un trozo de madera para adaptarlo al bolsillo de su camisa. Luego lo llevó durante meses, simulando que era una Palm.

El siguiente pasó es crear un MVP (Minimum Viable Product), que se trata de una versión parcial de un producto o servicio; es la ejecución básica de la idea, no la ejecución perfecta, señaló Álvarez.

A diferencia del pretotipo, el MVP debe ser lanzado al mercado de forma controlada pues el objetivo es aprender, en condiciones reales, qué es lo que la gente realmente quiere.

Y si el producto o servicio pasa esas dos primera pruebas queda una última llamada MAP (Minimum Awesome Product) que trata de ejecutar de manera extraordinaria la característica de la idea que haya resultado más relevante para los clientes potenciales .

Jbf