Aeropuerto logra colocar bono verde

Los bonos verdes representan los primeros pasos que puede dar México a través de sus empresas o bancos en proyectos sostenibles. Y el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México acaba de lograr su primer bono verde para financiar proyectos verdes como las instalaciones de energía solar, instalaciones de agua para gestión de residuos y focos Led Platinum en la terminal de pasajeros.

Ayer, el Grupo Aeroportuario colocó nada menos dos mil millones de dólares a diez y 30 años de vencimiento, y vaya que tuvo apetito de inversionistas: demandaron seis a uno dichos bonos. El financiamiento del aeropuerto y que sea un proyecto sustentable, lo hace un proyecto atractivo.

PROYECTOS SUSTENTABLES, EL MERCADO LOS PAGA BIEN

Federico Patiño es el encargado de la holding del nuevo Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México.

Ha buscado que sí sea un proyecto sustentable, con buen manejo del agua y electricidad, así como de desechos. Y el mercado paga muy bien por este tipo de proyectos, que son la nueva generación de proyectos. Incluso, el  bono logró recibir el grado GB1 por parte de Moody’s, siendo el primero en lograrlo de una economía emergente.

HSBC fue el principal asesor de la colocación (fue el Green Structuring Advisor), y hay que decir que HSBC ha estado liderando varios proyectos verdes en el mundo. Los otros coordinadores fueron JP Morgan y Citibank. El manejador del libro fue BBVA.

INVERSIÓN DE DIEZ MIL MDD

El Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México está buscando garantizar su financiamiento de la que se considera la obra del sexenio, la del aeropuerto capitalino, y que puede llevarse más de diez mil millones de dólares.

Ha encontrado en la colocación de bonos una buena fuente de financiamiento. Dichas colocaciones tienen, entre otras garantías, la del impuesto por uso aeroportuario de los usuarios de las actuales terminales 1 y 2, que como se sabe, están saturadas y su afluencia está casi asegurada.

El nuevo Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México que es la holding de la cual dependerá el nuevo aeropuerto, ha dado a conocer que varias etapas de la obra que están siendo licitadas, como sucedió con las pistas de aterrizaje y el edificio terminal.

El proyecto debe estar listo para 2020. Por lo pronto alcanza un financiamiento interesante, el primer bono verde de un proyecto mexicano.

MEADE SE COMPROMETE A IR BAJANDO DEUDA

José Antonio Meade, secretario de Hacienda, al comparecer ante diputados se comprometió a ir bajando la deuda pública; tomando en consideración los Requerimientos Financieros del Sector Público llegará este año a 50.5% del PIB, el nivel más alto de apalancamiento de la última década y media.

Para lograrlo, Meade se compromete a alcanzar el superávit primario para 2017, el que deja ver el esfuerzo en ajuste del gasto al no considerar los intereses de la deuda. El superávit primario deberá llegar a 0.4% del PIB durante el siguiente año. No hay más: el ajuste presupuestal viene. El tema de debate es: ¿todos ponen? O habrá ganadores y perdedores.

TEMORES INFLACIONARIOS A LA VISTA

Empiezan los temores inflacionarios por el tipo de cambio. Con todo y que el peso mexicano tuvo una mejor cotización, su nivel no baja de 20 pesos por dólar en ventanillas.

Y ello empieza a afectar algunas industrias importadoras. Ahí está el caso de las farmacéuticas (opiniones de la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias, la Unefarm), en la que vienen incrementos en precios por medicamentos importados.

Ellos hablan de que las sustancias activas importadas pueden llegar a niveles de 35%. Pero también está el caso de la industria automotriz, en la que hay modelos importados con todo y que somos un país de producción automotriz.  El tener un tipo de cambio a 20 pesos por dólar parece demasiado como para no tener efectos inflacionarios.