David Páramo

Análisis superior

David Páramo

30 Jun, 2017

Actos de cortesía

Los gobiernos de México y Estados Unidos han sido particularmente cuidadosos en mandarse mensajes positivos siempre que se habla de la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte o de los encuentros entre Enrique Peña Nieto y Donald Trump, luego de las fricciones que se presentaron en los primeros días de la administración del estadunidense que hizo cancelar el encuentro.

Ambos gobiernos optaron por mantener una relación institucional que ha sido bastante fluida y en la que se han venido construyendo una gran cantidad de acuerdos fundamentales para México como el que busca que la negociación del acuerdo comercial, migración y seguridad hemisférica sean parte del mismo paquete.

Una de las partes más visibles de este entendimiento que generará una rápida (pero intensa) renegociación del TLCAN es cómo Estados Unidos envía mensajes positivos cuando se presenta un tema con México.

Cuando el gobierno de Trump envió las cartas previas para iniciar la negociación del acuerdo comercial, ese mismo día el secretario de Estado de EU, Rex Tillerson, hizo el reconocimiento más grande de que el problema del narcotráfico tiene mucho que ver con la gran demanda que hay por drogas en EU.

Ayer por la mañana, el Presidente de Estados Unidos publicó un tuit que parecía bastante raro o, por lo menos, fuera de tiempo. Se puede leer: “New sugar deal negociated whit Mexico is very good one for both Mexico an US. Had no deal for many years wich hurt US badly”.

De entrada, parecía que se trataba de algo totalmente extemporáneo. No faltó por ahí alguno de los odiadores profesionales de Trump que tratara de revivir la teoría, infundada, en el sentido de que el Presidente de Estados Unidos está mal de la cabeza o vive fuera de la realidad. Esta fauna difícilmente puede justificar cómo este hombre ha logrado no sólo ser uno de los hombres más ricos del mundo, sino mandatario de la principal potencia del mundo.

El acuerdo azucarero se terminó el 6 de junio, es decir, el tuit llegó prácticamente con un mes de retraso, lo que hubiera sido un absurdo si no estuviera ligado al anuncio que hizo la Casa Blanca en el sentido de que durante la reunión del Grupo de los 20 que se realizará la próxima semana en Alemania, los presidentes Peña Nieto y Trump tendrán su primer encuentro desde que el segundo asumió el cargo.

¿NADA MÁS SE VA?

Hoy será el último día de Carlos Mena como titular de la Autoridad Investigadora de la Comisión Federal de Competencia Económica. Algunos, los más optimistas, creen que como dice el dicho: muerto el perro se acabó la rabia. Es un hecho que se fue sin hacer más daño como entregar su informe, que tardó dos años en hacer, sobre los slots del AICM.

Sin embargo, ahí está la cauda de pésimas investigaciones que una de dos fueron apoyadas por el pleno de la Cofece, en particular por la mala presidenta del organismo, Alejandra Palacios, o los miembros del pleno son tan torpes como para haberse tragado todos los espejitos que les vendió un hombre que se va por “motivos personales”, que van desde el reconocimiento de la incapacidad hasta que alguien le pidió que se fuera por la gran cantidad de filtraciones, demasiado específicas, sobre supuestas investigaciones en turno.

El nuevo en ocupar el puesto de Torquemada debe hacer un cambio radical, puesto que las investigaciones de la Cofece no funcionan. Por cierto, ¿tomó nota de que el presidente Enrique Peña Nieto no mencionó una sola vez a la competencia económica en los festejos a los cuatro años de la promulgación de la reforma constitucional a las telecomunicaciones y la competencia económica?

EXTRAÑO PERSONAJE

Alejandro Calvillo, propietario de una organización que se llama El Poder del Consumidor, es uno de esos personajes poco claros dentro de la sociedad civil. Por un lado, parece ser un hombre preocupado por el sobrepeso y los problemas de salud que genera, pero en realidad ha enfocado todas sus baterías a una lucha en contra de las empresas refresqueras como si fueran culpables de todos los males que aquejan a la sociedad.

Como fachada parece que su organización civil tiene buenas intenciones, pero en realidad trabaja como un cabildero financiado entre otros por la fundación Bloomberg para buscar un nuevo aumento a los impuestos que se cobran a las bebidas azucaradas. De suyo no tendría nada malo, puesto que cada quién puede impulsar los fines que mejor le parezcan; sin embargo, sí se debe exigir que ocurra de una manera transparente.

Luchar contra la obesidad y los problemas que genera es, sin duda, una medida loable que se contamina si hay quienes traen una agenda ulterior que estaría vinculada con partidos políticos y funcionarios públicos.

LAS TOMAS CLANDESTINAS AL ALZA

Según datos oficiales de Pemex, las tomas clandestinas (huachicoleo) de gasolina, gas LP y diesel, de enero a abril de 2016 existían mil 871 y en el mismo lapso del año en curso se han contabilizado tres mil 460, teniendo un incremento de 90%, aseguran las autoridades de la paraestatal; además dicho combustible robado se encareció en 30%. Los expertos nos aseguran que mientras Carlos Romero Deschamps, líder del sindictao petrolero, confabulado con altos funcionarios de Pemex sigan operando, dichas irregularidades nunca se van a terminar y dicho problema nunca se va a resolver, el cual cuesta miles de millones de pesos a Pemex. Es un secreto a voces que Romero Deschamps y todos sus secuaces de las secciones del sindicato petrolero son los responsables del robo a la nación.

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