José Yuste

Activo empresarial

José Yuste

15 Nov, 2017

La pistola de Ross contra México

 

A tan sólo tres días de reiniciar las negociaciones del Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el secretario de Comercio de EU, Wilbur Ross, trata de ponernos una pistola en la cabeza, y al más puro estilo altanero, sin propuestas comerciales ni de inversión, y tratando de pisotear a México en las negociaciones, Ross afirma que la desaparición del acuerdo comercial sería mucho más dañina para México que para Estados Unidos.

En otras palabras, las amenazas de Ross son claras: Se salen del acuerdo comercial si México no acepta sus condiciones, que dicho sea de paso, son inaceptables.

LA AMENAZA DE SIEMPRE: NO HABRÁ TLCAN

Todo esto lo dijo el secretario de Comercio de Estados Unidos en un evento empresarial con el periódico The Wall Street Journal, y no son más que de lo mismo que hemos escuchado de la Casa Blanca.

Es obvio que el gobierno de Donald Trump, ya sea el mismo inquilino de la Casa Blanca, su secretario Ross o su representante comercial, Robert Lighthizer, muestran una misma tónica: no querer negociar, sino amenazar con desaparecer el acuerdo comercial.

Se equivocaron quienes tenían esperanzas en que después de un mes sin negociaciones, la Casa Blanca rectificaría sus posturas. Estados Unidos llegará este 17 de noviembre a negociar la quinta ronda de pláticas en la Ciudad de México, argumentando lo mismo: imponer condiciones totalmente inadmisibles.

DEMANDAS IRREALES DE LA CASA BLANCA

La Casa Blanca ha solicitado a México demandas totalmente imposibles de realizar, y más que absurdas para tener un acuerdo comercial.

La Casa Blanca quiere, primero, revertir el déficit comercial con México, cuando el déficit comercial es porque importan insumos importantes para ellos, que además se traducen en productos con mayor valor. La Casa Blanca también quiere imponer a México una cláusula para revisar el acuerdo comercial cada cinco años, lo cual no daría ninguna certeza para invertir. Es otro punto absurdo para un acuerdo que debe garantizar condiciones de largo plazo a las inversiones regionales.

La Casa Blanca también quiere la obtención de una regla de origen de 50% del contenido nacional a favor de ellos, es decir, que el 50% de cada vehículo tenga insumos en Estados Unidos, otra condición absurda en un mundo globalizado, donde además los costos estadunidenses son elevadísimos para fabricar cualquier vehículo. Hoy la regla de origen del TLCAN es de 62.5% para los tres países, lo cual suena bastante razonable.

Y al final, la Casa Blanca, siguiendo todas sus demandas irreales, también quiere imponer condiciones para importar bienes agropecuarios, según le convenga.

CUANDO A ROSS SE LE OLVIDÓ NEGOCIAR

Ya vimos que la Casa Blanca llega a la quinta ronda de negociaciones del TLCAN con más de lo mismo: queriendo imponer condiciones imposibles de realizar, que más allá de buscar modernizar el acuerdo comercial, sólo lo quieren a su favor. Las declaraciones de Wilbur Ross sólo muestran el grado altanero de alguien que quiere avasallar y pisotear a su contrario. No está negociando, sólo amenaza con salirse del acuerdo comercial.

HOY, LAS GASOLINERÍAS DE PEMEX… CAMBIAN

Viene la nueva franquicia Pemex, donde la petrolera estatal buscará competir con las nuevas gasolinerías que se están abriendo.

Para ello, hoy José Antonio González Anaya y Carlos Murrieta, director general y director de Pemex Transformación, respectivamente, estarán presentando un modelo de gasolinería con contratos más rentables para la operación comercial. Incluso, se ha hablado de sacar la nueva marca de gasolinerías, que no sean Franquicia Pemex.

Hoy Pemex estará dando a conocer acuerdos con grandes grupos de gasolinerías. Así que ya veremos la sustitución de la famosa Franquicia Pemex, que fue el modelo de estación de servicio de los últimos años. Y Pemex deberá de competir aquí también.

 

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