Piden cerrar cuentas

Por momentos parecería que el presidente de la Asociación de Bancos de México, Daniel Becker, está más ocupado en que le salga bien su evento (la 86 Convención Bancaria) que en los temas fundamentales de la banca.

El Padre del Análisis Superior no se detendrá, al menos en este instante, a cuestionar su reacción gremial ante la crisis bancaria en Estados Unidos y sus posibles implicaciones en México, pero sí en señalar omisiones que gremialmente ha tenido la ABM y que implican un serio problema para su operación.

El 15 de febrero se publicó en el Diario Oficial de la Federación un acuerdo según el cual la Tesorería de la Federación insta a que todas las dependencias de la administración federal deben cancelar las cuentas que tienen en la banca antes del 31 de marzo y volverlas a abrir, incluso en el mismo banco, siempre y cuando exista una justificación.

Entre los directivos del sector bancario se asegura, en privado, que se trata de una medida del organismo que encabeza María Elvira Concheiro para impulsar que estas cuentas se abran en el Banco del Bienestar.

Algunos aluden, otra vez en privado, que el Presidente ha dicho que ya se cansó de hacer ricos a los banqueros administrando los recursos federales y que se debe cambiar la operación de una manera que se beneficie al banco estatal.

Otros más, metidos en la perversidad política, dicen que se les ha dicho a las entidades que si usan el Banco del Bienestar se ahorrarán recursos que tendrían que devolver a la Tesofe y el gobierno podría usar esos fondos sin ningún control para usar esos recursos, por ejemplo, en campañas políticas. Tristemente, es poco probable que este tema que, según los banqueros en privado, no únicamente va en contra de la transparencia, sino que podría dificultar la operación dentro del sistema financiero, no será tratado en la 86 Convención Bancaria.

REMATE CAÍDO

En términos generales, podría considerarse que la crisis bancaria en EU no tendrá impactos muy graves para el sistema financiero mexicano, a no ser que ocurriera algo que precipitará más caídas bancarias que derivaran en una crisis sistémica. El Padre del Análisis Superior reitera que, seguramente, habrá quienes pasen dolor, pero no será muy largo ni muy extendido y que se dará una depuración tanto en prácticas bancarias y esas modas que surgen de tanto en tanto que tratan de reinventar al sistema financiero. 

En principio, las reacciones de las autoridades financieras de EU han sido correctas para contener el primero de los sesgos preocupantes que podría ser una corrida generalizada sobre toda la banca. De entrada,  en muy pocas horas rompieron las barreras de seguro de depósito del FDCI, limitado a 250 mil dólares, a la totalidad, sin anunciar ningún programa de rescate bancario, sino de cobertura a los clientes.

Sí, estableciendo que la recuperación del monto máximo sería automática y que el resto vendría de la recuperación de los fondos. En cuanto a la economía mexicana, es necesario tener claros algunos puntos: se mantiene la solidez fundamental de las finanzas públicas, como ha sido una divisa del país durante ya más de tres décadas; los bancos mexicanos son estructuralmente muy sólidos y tienen poca exposición a los problemas que han causado las dificultades en EU.

REMATE UNIDO

Bien por Volaris, Aeroméxico y la Canaero, que ayer se sumaron a una extensa y necesaria explicación sobre lo que sucedería si se autoriza el cabotaje en el país.

Es difícil encontrar argumentos racionales que justifiquen entregar al sector aéreo internacional a cambio de nada. Es, como fue documentado por las líneas aéreas y su organización gremial, una equivocación grande, puesto que no disminuirá el precio de los boletos ni aumentará la conectividad, como se ha dicho.

La realidad, pura y llana, es que gran parte del elevado precio de los boletos de avión se explica por la enorme cantidad de impuestos que se les cobran a los pasajeros; que si las líneas aéreas no cubren ciertas rutas es porque no son rentables y tampoco lo serán para extranjeros, que sólo buscarían la parte buena del sector.

El pretexto que han utilizado es que con esto podrían hacer que el AIFA fuera viable; sin embargo, si realmente quisieran impulsar la aviación, aumentar la conectividad y darle viabilidad, sería fundamental que los legisladores de Morena, el partido en el gobierno, hicieran los dos cambios a las leyes de aviación que pondrían a la autoridad mexicana de aviación cerca de recuperar la Categoría 1.