Altagracia Gómez, la entusiasta asesora de Sheinbaum

A sus 32 años, Altagracia Gómez Sierra, presidenta del Consejo de Administración de Grupo Minsa, es una de las principales cartas de Claudia Sheinbaum como su asesora económica y enlace con el sector privado.

La muy activa Altagracia Gómez es una entusiasta defensora de Sheinbaum y su política económica porque generará –dice– un desarrollo con mayor conciencia social y más incluyente no sólo de clases marginadas, sino también de mujeres y jóvenes quienes a través de distintos programas de educación dual y, siempre contando con el apoyo de empresas, tendrán fuentes de empleo en las que se podrán capacitar.

Es también una firme convencida de las oportunidades que representa el nearshoring o relocalización de inversiones en México, aunque reconoce los grandes retos que implica en materia energética, de infraestructura y de seguridad.

Se debe aspirar, dice, a que las empresas no sólo quieran estar en México porque su cercanía a Estados Unidos sino también porque tener a los trabajadores capacitados como una política permanente de vinculación entre el gobierno, las universidades y las empresas.

¿SE REPETIRÁ EL CASO DE ALFONSO ROMO?

Interesante también la postura de Altagracia Gómez en relación con la política agropecuaria. Reconoce que no hay un sustituto del glifosato y que se debe, por lo tanto, mantener abierta la importación y su uso.

En cuanto al panel arbitral en el T-MEC –que se resolverá en noviembre, ya con el nuevo gobierno en funciones–, confía que México ganará porque la siembra del maíz transgénico está prohibida desde hace muchos años y lo que se siembra aquí es maíz híbrido.

Lo que está prohibido en el decreto es la importación del maíz transgénico para uso humano y México sólo produce maíz de harina y tortillas para el mercado nacional.

Además, en el tema de biodiversidad se pretende demostrar que pudiera dañar al maíz criollo o mexicano y la correlación y no la casualidad en ciertos daños a la salud.

Muchos comparan el entusiasmo de Altagracia Gómez con el que tenía – ¿tendrá aún?– Alfonso Romo, quien fue en la campaña de López Obrador el enlace con el sector privado, pero comenzó a perder fuerza primero como interlocutor, porque les aseguró a los empresarios que no se cancelaría el NAIM, y después al interior de la propia 4T, hasta que terminó renunciando.

RAMÍREZ DE LA O: RIESGOS EN SECTOR ASEGURADOR

Primero que nada, una aclaración y una disculpa porque ayer publiqué erróneamente que el secretario de Hacienda, Rogelio Ramírez de la O, no participaría en la 33ª Convención de la AMIS.

En la inauguración de la convención, Ramírez de la O se refirió a los retos que enfrenta la economía y en especial la industria aseguradora; desde riesgos impredecibles como la pandemia de covid; la intensificación de tensiones geopolíticas que generan presiones al comercio y economía mundial; ataques a embarcaciones en el Mar Rojo al generar disrupciones en el tránsito de mercancías elevando los costos de las primas de seguros para transporte marítimo; y el cambio climático y el crecimiento en desastres naturales.

Destacó que en 2023 la emisión de primas llegó a sus niveles prepandemia y reconoció que el sector asegurador representa sólo el 2.4% del PIB frente al promedio de 9% en la OCDE.

Evidentemente, Ramírez de la O no hizo ninguna referencia al tema que preocupa a los analistas del sector privado: el déficit público que superará este año el 5.7% del PIB.