Cambio de enfoque en Davos; empleo y distribución, los temas

CIUDAD DE MÉXICO.- Los debates del primer día del Foro Económico Mundial de Davos se distinguieron por el cambio de enfoque. De ser una cumbre de negocios, preocupada por la generación de riqueza y crecimiento económico, ahora las discusiones se centran en una distribución más equitativa del ingreso, la creación de empleos y el manejo de las empresas con un sentido ético.

Las preocupaciones empresariales incluyen cómo evitar los riesgos sistémicos y cómo hacer para que la recuperación mundial permita un mundo más incluyente, ya que casi la mitad de la riqueza mundial está en manos del uno por ciento más rico de la población, y la otra mitad se reparte entre el 99% restante.

Feike Sijbesma, presidente del consejo de Royal DSM, de Holanda urgió a las compañías a cabildear con sus gobiernos políticas que privilegien la actividad productiva y la creación de plazas de trabajo, al argumentar que los precios de las acciones raramente premian a las empresas por la creación de empleos o por la adopción de políticas de desarrollo sustentable.

"Hay que cambiar el diálogo de lo que hacemos con el dinero que ganamos, a la forma en cómo hacemos el dinero (…) hay una forma ética de manejar una compañía y que puede ser rentable", afirmó Indra Nooyi, presidenta de Pepsico.

En esta cubre, denominada Rediseñando al Mundo, a la que asisten unas dos mil 500 personas, entre presidentes y directores de empresariales y líderes de la sociedad civil, además de académicos, así como 40 presidentes y jefes de gobierno, se respira un ambiente de mayor tranquilidad respecto de los años pasados, cuando la economía mundial y de las principales economías industrializadas estaban sumergidas en la crisis. Pero tampoco hay un optimismo desbordante y más bien se percibe un sentimiento de cautela.

Cautela ante promesas

En un panel se analizó si el sistema financiero es ahora más seguro que hace cinco años, y cerca de dos tercios de los asistentes expresaron que sí. Sin embargo, los analistas aconsejan no fiarse mucho de los banqueros al cuestionar con cierta ironía que cómo es posible que quienes gestaron la crisis de 2007-2008 ahora prometen sacar al mundo del letargo.

Paul Singer, el fundador multimillonario del fondo de cobertura Elliott Management, argumentó que la exposición total de los bancos a los derivados es un misterio, pero que seguramente es demasiado alta como para relajarnos. Los altos niveles de apalancamiento y las hojas de balance misteriosas siguen siendo una falla significativa.

Los asistentes convocaron a Europa a hacer más por la recuperación económica, al señalar que si bien el viejo continente está en camino de la recuperación, su bajo crecimiento no puede hacer mucho para generar empleos, mientras que el paro estructural excesivamente alto amenaza con crear una generación perdida en dicha zona, en tanto que Axel A. Weber, ex-presidente del Banco Central de Alemania, advirtió sobre la autocomplacencia y el posible avance de la derecha.