Evita malestares al viajar entre zonas horarias con estos consejos

CIUDAD DE MÉXICO.- La descompensación horaria, o también conocida como ‘jet lag’, se trata de un desequilibrio producido en el ritmo biológico del cuerpo, debido al cambio drástico de huso horario cuando se viajan largas distancias. El término médico para este malestar es 'disritmia circadiana'.

Fatiga, insomnio, estreñimiento, diarrea, confusión y dolor de cabeza, son algunos de los síntomas que provoca este desfase de horario.

El 'jet lag' se produce principalmente cuando se viaja de oeste a este, porque al moverse en esa dirección se “pierden” horas durante los cambios de husos horarios, y esto provoca que el reloj biológico tenga un ciclo superior a 24 horas, alterando así a los ritmos circadianos, los cuales definen cuándo debemos dormir, comer y hacer otras necesidades biológicas.

En caso de viajar de este a oeste, el cambio no afectará tanto al ciclo biológico, sin embargo también es bueno cuidarse de alguna alteración.

Si estas a punto de planear un gran viaje, o simplemente estás cansado se sufrir sus desagradables síntomas, te compartimos algunos consejos para evitar o recuperarte lo más posible el ‘jet lag’.

Antes del viaje

Descansa muy bien antes de viajar.- Acuéstate temprano algunas noches anteriores a la fecha de tu viaje.

Prepárate y mentalízate.- La Academia americana para la medicina del sueño (AASM por sus siglas en inglés) recomienda modificar lentamente tu horario de sueño, unas semanas antes de viajar para así ya estar algo acostumbrada.

Durante el vuelo

Usa tapones para los oídos.-  El presidente de la AASM, Timothy Morgenthaler recomienda cancelar el ruido durante el viaje para evitar dolores de cabeza y fatiga mientras vuelas.

Evita dormir en horas que no serían apropiadas para dormir en el lugar de destino.

Aprovecha cualquier escala para sentirte más cómodo y descansar.

Usa ropa cómoda.- Necesitas usar un atuendo que te permita descansar y poderte mover lo más posible mientras estás en el avión.

Toma mucha agua.- Parte de los síntomas de jet lag incluye jaqueca, dolor muscular y nauseas. Según Morgenthaler estos malestares pueden ser también provocados por deshidratación generada durante el vuelo, por lo que es recomendable ingerir líquidos durante y después del vuelo, para evitar mayor sensación de cansancio. El agua también permite que te sientas más alerta y puedas concentrarte en lo que hagas durante tu viaje.

Ya en tu destino

Ten paciencia.- No esperes acostumbrarte inmediatamente al cambio de horario. Investigaciones han indicado que el cuerpo humano se puede ajustar a dos zonas horarias por día, pero esto puede requerir de un día entero, para poder percibir una recuperación.

Asoléate.- La exposición a la luz solar puede ser muy provechosa, aun cuando prefieras quedarte debajo de las sábanas al medio día, salir a sentir la luz solar te ayudará a impulsar el ciclo hormonal que eventualmente te ayudará a dormir a la hora indicada en la noche.

Ejercítate.-  Esto te permitirá generar las endorfinas y hacer que te sientas mejor y estira los músculos para deshacerte de la rigidez que provoca un vuelo largo.

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