Ellos son los 'Freegans' y comen de la basura

CIUDAD DE MÉXICO.- Existe en Nueva York un movimiento un tanto extremo, pero con un propósito más profundo que simplemente ahorrar, los freegans.

The Guardian cuenta la historia de Marie, una mujer francesa que vive ilegalmente en Estados Unidos sin un trabajo fijo. Se queda en casa de un amigo y lo ayuda con varias tareas como la limpieza y la búsqueda (no compra) de comida. Marie usa ropa usada, se mueve sólo en bicicleta y dos o tres veces a la semana recorre los contenedores de basura de los supermercados entre las 8 y 9 de la noche para conseguir comida.

(Cortesía Murdo Macleod)
 

Para ella, una tienda llamada Food Train es el lugar perfecto para conseguir fruta fresca, y Union Market tira latas de frijoles que aún no expiran, ensaladas de Kale y ravioles frescos para hacer espacio para lo que venderán al día siguiente.

Ella aprendió a hacer esto gracias a un grupo de Freegans que se reúnen una vez al mes para hacer el “tour de la basura”. Ahí conoció a Kalish, una mujer de 52 años, freegan desde 2004, que no gasta en más que comida para gatos y papel de baño. De la comida que recolecta, mucha la dona a personas necesitadas. Antes, Marie también regalaba mucho de lo que encontraba a personas sin hogar, pero dejó de hacerlo cuando una mujer le gritó por darle comida de la basura.

(Cortesía Supermoney)
 

De acuerdo con el programa de medio ambiente de las Naciones Unidas, en Estados Unidos se desperdicia el 40% de los alimentos. Esto equivale a 9 kilos de comida por persona al mes. Lo que los freegans hacen no es sólo ahorrarse un poco de dinero, es eliminar su huella y tapar los hoyos de nuestra sociedad consumista para ayudar al planeta minimizando el desperdicio.

Consumen los menos recursos posibles y promueven la generosidad y la cooperación.

Leyendo comentarios de freegans y trabajadores de supermercados encontré que hay ciertos comercios que tiran comida porque los empaques están dañados, especialmente los que tienen un target más “Premium”, pero que el mejor lugar para buscar comida en la basura es en los centros de distribución porque las tiendas muchas veces no aceptan alimentos que expiren en menos de una semana, esto quiere decir que kilos y kilos de alimentos en buen estado y sin caducar se van a los basureros.

(Cortesía Ew Study)
 

Definitivamente este estilo de vida no es para todos, creo que yo no podría adoptarlo a menos de que tuviera mucha necesidad, pero estas personas que consumen lo que otros consideran desperdicio y que además lo reparten a quienes más lo necesitan están contribuyendo a su comunidad sin anunciarlo.

En Estados Unidos los comercios no regalan la comida que se les queda por miedo a que los demanden si alguien se enferma, así que estas personas se convierten en los Robin Hood de las sobras.

¿Tú  rescatarías comida de un basurero?