Identificar y explotar las capacidades: receta para el éxito

Por: Rubén Sánchez Gómez*

CIUDAD DE MÉXICO.- En 1989 John K. Coyle, un estudiante de Diseño de Productos en la Universidad de Stanford, buscaba dominar sus dos pasiones: una metodología que le permitiera encontrar soluciones de forma ágil y el patinaje de velocidad. Aunque a simple vista podría parecer que sus sueños no tenían nada en común, pronto descubriría que las dos lo llevarían de la mano por el camino del éxito.

Confiado en calificar para los Juegos Olímpicos de Invierno de 1992 en Albertville, Francia, Coyle, en ese entonces el número 12 del mundo en su disciplina, se propuso alcanzar el sexto puesto, y luego, como meta final, el primero. Tan sencillo y complicado como se lee, John K. Coyle no permitió que las muchas adversidades se interpusieran entre él y sus metas.

Poco sabía que sus dos pasiones se cruzarían de una manera que le enseñaría la esencia de construir sobre sus fortalezas. Viviría una experiencia en la que sin emoción tendría que tratar los inmensos desafíos que enfrentaba, convirtiéndolos en oportunidades para aprender y replantear; al mismo tiempo buscar soluciones como diseñador de producto, con una intensa pasión y una curiosidad sin límites.

Sobre todo, tendría que hacer lo contrario de lo que hacían otros y lo que la mayoría de los expertos le aconsejaban. En lugar de tratar de compensar o arreglar sus debilidades, tendría que concentrarse en sus fortalezas naturales. Al principio no pareció ser lo correcto, y romper con el status quo nunca es fácil, pero ahora comprende que es la única manera de verdaderamente sobresalir. Esta lección contraintuitiva es exactamente lo que cualquier persona, que busque construir una capacidad distintiva para un equipo o empresa, debe aprender.

¿Qué tiene que ver esto con el mundo de los negocios, en específico con la banca? La mentalidad y el acercamiento de Coyle —medallista olímpico, destacado conferencista y consultor de empresas— puede ayudar a las instituciones financieras a funcionar de una mejor manera. Enfocarse en lo que uno hace bien es algo intuitivamente seductor, pero muy pocas empresas dirigen su estrategia en esta dirección. Es fácil perderse en perseguir lo que otros hacen: tratar de arreglar la larga lista de debilidades o encontrar lo novedoso en un mundo que cambia constantemente.

Fit for Growth, el enfoque práctico de Strategy& —parte de la red global de PwC— para la transformación de los negocios, es un exitoso modelo que ayuda a las compañías a administrar sus costos estratégicamente, permitiéndoles reducirlos y al mismo tiempo crecer más fuertes. De esta manera las empresas que aplican este método tienen mayores retornos de inversión para los accionistas y un crecimiento sostenido. ¿Por qué? Porque invierten donde está su estrategia. A través de recortes constructivos de costos conectan su estrategia para enfocarse en esas capacidades que realmente los diferencian de la competencia, tornándolos aptos para el crecimiento.

En concreto en la industria financiera en nuestro país, donde las principales mega tendencias están definiendo la evolución del sector hacia un mundo digital. Los cambios demográficos y sociales (como el aumento de nativos digitales y de la fuerza laboral capacitada), los avances tecnológicos, la apertura en el acceso a soluciones digitales (como las redes móviles y teléfonos inteligentes), el cambio en el poder económico global, el incremento de la inversión extranjera y el crecimiento del sector emprendedor, son sólo algunos de los desafíos a los que se enfrenta la banca.

Es importante voltear a lo que sucede con FinTech, y la intersección de los servicios financieros y el sector tecnológico. FinTech está cambiando la industria de los Servicios Financieros desde afuera hacia adentro, al aprovechar que existen necesidades no cubiertas por los jugadores tradicionales y que los consumidores demandan, produciendo una disrupción total y una transformación como resultado en la forma de hacer las cosas. El incremento de la tecnología digital ha alterado dramáticamente el panorama del sector de los servicios financieros. Desde 2011, el número de startups relacionadas con FinTech ha aumentado más de 50%, y pareciera que en el último año ha pasado del tópico de moda seguido por unos cuantos, al que nadie debe descuidar

Lo anterior nos lleva a preguntarnos cómo se encuentran los bancos mexicanos para enfrentar estos cambios, los retos que se les presentan y cómo pueden mejorar su rendimiento. Es aquí donde el conocimiento de K. Coyle es fundamental. El exatleta se centró en mejorar sus habilidades y fortalezas, en lugar de tratar de compensar sus errores o debilidades, un principio básico que los estrategas de negocios a veces olvidan. Las compañías más exitosas tienen una visión más clara y articulada de lo que es importante para ellos y para sus clientes, además de entender que la manera de ganar consistentemente es a través de lo que hacen mejor y no sólo por lo que venden.

Lo mismo debiera suceder con una empresa que quiere crecer. Fit for Growth alienta a las organizaciones a identificar sus capacidades distintivas, potenciarlas y explotarlas. Si realmente quieres crecer, deja de lado lo que no tienes desarrollado e invierte en donde eres bueno; remueve todo aquello que te distrae para poder enfocarte en lo que realmente quieres hacer. Crece de adentro hacia afuera. Refuerza tu core, tu esencia o explora con tus mismas capacidades pero en otra ubicación. El punto es que no te alejes de lo que mejor sabes hacer; al contrario, mantente lo más cercano a ello e innova dentro de tu zona de confort.

Además de ubicar perfectamente sus habilidades y aceptar sus debilidades, las entidades financieras deben contar con una estrategia; es decir, conocer en sus más mínimos detalles las competencias que realmente son importantes y la capacidad de triunfar en el mercado. Esto le permitirá a la organización crear un entorno y una cultura que evolucione, integre y fomente el cambio al:

1. Planear una estrategia: Articula claramente las capacidades que son realmente sustanciales para ella y que te ayudarán a ganar en el mercado.
2. Transformar la estructura de costos: Desarrolla una agenda clara de tus costos, tomando decisiones enfocadas en mejorar el proceso.
3. Construir las capacidades diferenciadoras: Invierte en las pocas capacidades diferenciadoras gracias a las mejoras en la estructura de costos.
4. Reorganizar para crecer: Implementa un modelo de organización, procesos y sistemas para liberar el potencial y habilitar la agilidad para el crecimiento.
5. Generar el cambio y la evolución cultural: Crea un ambiente y cultura que tengan el cambio impreso en el ADN de la compañía y que permitan un futuro sustentable.

Uno de los grandes obstáculos a los que se enfrenta la industria bancaria es la falta de preparación para la innovación, y su incapacidad de adaptarse a los cambios digitales. Para seguir siendo competitivas e innovadoras, las instituciones financieras deberán, alineadas a su estrategia, actualizar sus procesos e infraestructura para hacerla más ágil y lograr una mejor capacidad de respuesta.

Para muchas instituciones financieras tradicionales, el cambio de enfoque puede resultar abrumador; sin embargo, es necesario tener presente que la nueva norma será impulsar un modelo customer centric en lugar de product centric, siempre volteando a ver a los clientes y sin dejar de resaltar sus fortalezas, lo que los hace únicos.

*Rubén Sánchez Gómez es Gerente de Strategy& de PwC para Servicios Financieros