Rogelio Ramírez de la O, un secretario enfocado

A muchos les corre prisa de conocer los nuevos nombramientos porque aspiran a ocupar algún cargo en el apretado andamiaje de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que encabeza Rogelio Ramírez de la O, pero a éste lo que le importa, antes de ajustar la burocracia, es definir el contenido del paquete económico que deberá presentar el presidente Andrés Manuel López Obrador al Congreso el próximo 8 de septiembre.

Él no es un secretario vocal, pero sí es un secretario enfocado. Tiene conocidos, pocos amigos, no es amante de las recomendaciones, pero sí de la evaluación de sus subalternos y la mejor evaluación la realiza a la hora de conocer su trabajo y sus propuestas.

Le traigo esto a colación porque, antes de su llegada, circularon nombres por aquí y por allá, de llegadas y de salidas. Algunas ocupan más que otras, como las de las comisiones de supervisión financiera, porque, en el caso de la CNBV, que preside Juan Pablo Graf, es tal la cantidad de trabajo a desahogar, que algunos supervisados perciben que, después de que “tomó ritmo” en los procesos de autorización, se han alentado, porque se rumoran cambios ahí y en diferentes áreas de la Subsecretaría de Hacienda, que lleva Gabriel Yorio.

Hasta ahora, todos deben estar trabajando en su encomienda, que en algunos casos es dual: secretarial y presidencial. Hay puestos, incluso, que tienen visto bueno lineal, como áreas de la Oficialía Mayor, la Subsecretaría de Egresos, la Tesorería de la Federación, el SAT, Aduanas, los bancos de desarrollo y las vocerías del ramo que —como el resto del sistema— pasan por la oficina del vocero presidencial.

El secretario Ramírez de la O no es vocal o, al menos hasta hoy, nunca lo ha sido, pero tampoco le encanta filtrar nombres ni de quién viene o de quién se va. Su foco está puesto en la integración de un paquete que el Presidente, por su estilo personal de gobernar, quiere conocer a detalle.

La tarea de ambos es lograr un equilibro difícil: que el gasto público y las capacidades de financiamiento para el desarrollo impulsen la recuperación de sectores y regiones que están mostrando rezago en la reactivación económica y, al mismo tiempo, apuntalar la casi veintena de programas sociales prioritarios. Lo demás es pura grilla, ¿no cree?

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DE FONDOS A FONDO

#Puertos… Quien fue reconocida por la Comisión Interamericana de Puertos de la OEA es la capitana de altura, Ana Laura López Bautista, coordinadora general de Puertos y Marina Mercante, Secretaría de Marina, México, con el Premio Marítimo de las Américas 2021, que incluye la categoría Mujer Sobresaliente del Sector Portuario y Marítimo, organizado por la Secretaría de la CIP (S/CIP) en colaboración con la Comisión Interamericana de Mujeres (CIM) de la OEA.

Su currículum es extraordinario, pero el premio reconoce su desempeño en la tarea de trasladar las facultades del control y administración de los puertos del país de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) a la Secretaría de Marina (Semar), con el fin de combatir la corrupción y el contrabando de drogas y otros precursores químicos en los 102 puertos y 15 terminales fuera de puerto del país.

Una tarea que implicó el traspaso intersecretarial de cuatro áreas administrativas y el Fideicomiso de Capacitación para el Personal de la Marina Mercante Nacional (FIDENA), sus recursos humanos (710 personas), materiales y financieros; así como la modificación de 6 normativas; más de 50 reuniones de trabajo y las acciones necesarias para continuar la operación diaria de los puertos y la Marina Mercante del país bajo un escenario de pandemia a causa del SARS-CoV-2, y donde los últimos datos muestran que, de enero a junio, ingresaron por las 14 Administraciones Portuarias un total de 68,781 toneladas de carga comercial, superando ya ligeramente el monto del tonelaje en igual lapso, pero de 2019, cuando el registro fue de 68 mil 545 toneladas.

Transitar un cambio administrativo de esta naturaleza sin afectar el proceso comercial-aduanal sí que es un desafío. ¡Una capitana de la Semar en puertos!... ése es el otro desafío. ¡Felicitaciones!