La infraestructura, un pendiente en refinería Dos Bocas

La refinería de Dos Bocas no tiene entre sus planes la construcción de un ducto que le permita la salida y distribución adecuada de los combustibles que estará produciendo, además de que mucha de la infraestructura imprescindible para su operación no estará lista antes de julio, mes en el que se tiene prevista su inauguración oficial.

De acuerdo con una presentación de la Secretaría de Energía (Sener), a marzo de este año el proyecto ya tenía un progreso de 87%, principalmente por los trabajos, construcción e instalación de las plantas procesadoras.

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Sin embargo, para especialistas del sector, el avance informado por el gobierno no es real si se toma en cuenta el peso de cada proyecto que está siendo ejecutado, pues muchos de estos trabajos forman parte de la ingeniería civil y no de la operativa.

En entrevista, Jesús Carrillo, director de economía del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), aseguró que los trabajos hechos hasta ahora le permitirán a Petróleos Mexicanos (Pemex) llevar a cabo algunas mezclas, pero no el procesamiento del crudo y la refinación.

Esto significará que se “in- augurará una refinería que no refina”, pues el retraso provocará que el procesamiento de crudo no comience sino hasta 2024.

Sin ducto 

Ramsés Pech, analista y ase- sor de la industria energética de Caraiva, León & Pech Architects, dijo que la también llamada Refinería Olmeca no contempla la construcción de un ducto que permita sacar de manera eficiente los combustibles para su distribución en el país.

Por barco 

Esto provocará que la empresa del Estado recurra a dos alternativas.

La primera es vía marítima, donde el producto terminado sea movido con barcos de alto calado con capacidad para transportar de 200 mil a 300 mil barriles, o la creación de un sistema donde barca- zas, de hasta 100 mil barriles, lleven los refinados a los complejos portuarios de Campeche, Progreso, Veracruz o Pajaritos, lo cual no resultará más costoso que moverlo por ducto.

No obstante, para lograr esta alternativa es necesario que el Puerto de Dos Bocas, tenga el presupuesto suficiente para poder operar y ayudar a Pemex a sacar ese producto y distribuirlo al mercado nacional.

Uno de los problemas que se tendrían es que se dependería mucho de las condiciones climáticas, pues durante algunos meses se presentan nortes y ciclones, lo que provoca que los puertos en el Golfo cierren”.

Via terrestre 

El experto dijo que la segunda alternativa son las vías terrestres, que además de ser más costoso es poco eficiente, pues para poder mover el volumen de producción esperado por no menos de 300 mil barriles diarios, serían necesarias más de mil 590 pipas.

Sobre la llegada del crudo que será procesado, dijo que éste es un aspecto que no tendrá problema, pues éste llegará desde las plataformas de aguas someras.

Retrasos 

Fuentes con conocimiento del tema y que prefieren no ser nombradas aseguran que el suministro de gas natural a la nueva refinería también es uno de los puntos imprescindibles para su operación, sin embargo, la construcción del gasoducto de 65.6 kilómetros lleva un avance de 65%.

Es decir, aún faltan poco más de 20 kilómetros que de no ser concluidos antes de julio, el complejo no podrá arrancar.

Consideran que en el proyecto hay fallas y omisiones “que fueron premeditadas con la intención de pensar primero en una inauguración y en que se vean primero equipos al margen de la operación”.

De acuerdo con datos de la Sener hasta marzo pasado, el cableado en la llamada Refinería Olmeca, será de un total de 24 mil 439 kilómetros de los cuales solo se han instala- do mil 150 kilómetros, es decir, apenas tiene un avance de 5%, y sin estos trabajos no será posible “ni prender un foco”.

Trabajos costarán el doble: Imco

El director de economía del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), Jesús Carrillo, aseguró que otro de los problemas a los que se está enfrentando el proyecto de Dos Bocas, es el sobrecosto, pues podría alcanzar los 16 mil millones de dólares.

En un principio se estimaba que la inversión sería de ocho mil millones de pesos, sin embargo, este monto se incrementará a entre seis y ocho mil millones de dólares.

Esto significa que la refinería habrá representado un gasto total de 14 mil a 16 mil millones de dólares, lo cual tendrá un impacto en las finanzas de Pemex y el gobierno federal, no sólo de esta administración, sino de las futuras.

Por: Nayeli González 

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