Pemex vive de sus glorias pasadas; sus principales yacimientos decaen

Petróleos Mexicanos (Pemex) “vive de sus glorias pasadas”, pues su nivel de extracción actual es el más bajo en décadas, y es que sus principales yacimientos productores han comenzado a declinar, sin que exista un proyecto que permita revertir esta tendencia. 

Si bien la empresa tiene un número importante de asignaciones, en muchas de estas no está trabajando de manera adecuada a fin de garantizar la producción futura. 

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En entrevista, un excomisionado de la Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH) que prefiere no ser nombrado, aseguró que la empresa solo realiza algunos trabajos de sísmica en bloques que le fueron asignados en Ronda Cero, es decir, asignaciones en las que hace lo mínimo indispensable “para que no se las quiten”. 

“A Pemex le han dado muchas áreas, también en campos no convencionales, pero no hace nada, en aguas profundas tiene y no hace nada, sólo está viviendo de sus glorias, sólo está haciendo lo mínimo para que no se las quiten. Hace procesados sísmicos y con eso mantiene kilómetros y kilómetros cuadrados de área a los que no les hace gran cosa, pues ni los interpreta ni nada”. 

Dijo que la falta de recursos por parte de la empresa la ha obligado a posponer el desarrollo de proyectos tan importantes como Zama, en el cual su avance ha sido mínimo y la mayor parte de los trabajos los reprogramó para los siguientes dos años. 

Sobreexplotación 

Esto obliga a la empresa a sobreexplotar los campos considerados nuevos como lo es Quesqui y Tupilco Profundo, los cuales ya están presentando indicios de declinación. 

“El 52% de la producción viene de siete campos, de los cuales sólo dos o tres son nuevos. Entre los principales se encuentran Quesqui y Tupilco Profundo, este último se descubrió hace poco, y está en el cuarto y quinto lugar de producción. Desafortunadamente, estos campos, sobre todo que Quesqui, los están sobreexplotando, no están teniendo una óptima operación, los cuales tampoco están cumpliendo con el compromiso inicial que tenían (de extracción).” 

Metas sin cumplir 

Al arranque de esta administración, el gobierno federal y Pemex tenían como objetivo alcanzar una producción de dos millones 697 mil barriles por día en seis años. Sin embargo, dicha meta no pudo ser cumplida, aun cuando la empresa ejerció importantes inversiones en campos nuevos. 

Es así que conforme avanzaba esta administración también se redujeron sus metas, por lo que su última perspectiva es la de alcanzar un millón 887 mil barriles por día, 30% menos a lo esperado. 

De acuerdo con un análisis del BBVA Research, en el cuarto trimestre la producción de los nuevos campos promedió 571 mil barriles diarios. Para alcanzar las metas de producción de los siguientes años, es necesario que Pemex frene el declive en los campos.

Por Nayeli González