¿Sin límites? Inteligencia Artificial de Google crea a sus propios hijos

Las grandes empresas tecnológicas están compitiendo por desarrollar la Inteligencia Artificial (IA) más sofisticada, sin embargo, Google dio un nuevo paso, ya que creó a sus propios hijos. Aquí te compartimos todos los detalles.

Parece que la inteligencia artificial de Google quiere tener una familia numerosa, para ello, está creando a sus propios hijos.

Ingenieros del gigante tecnológico explicaron que el sistema AutoML (Aprendizaje Automático Automatizado) es manejado por una inteligencia artificial controladora, la cual es considerada como la “madre” que propone diseños para el desarrollo de una IA “hija”.

De acuerdo con los ingenieros, esto les permitió crear modelos que logran precisiones a la par de los modelos de última generación diseñados por expertos en aprendizaje automático.

Los ‘niños’ de la IA tienen ciertas características de diseño que parecen no tener un uso claro para sus propios investigadores”, mencionaron los ingenieros de Google.

Es importante mencionar que la inteligencia artificial trabaja con base en el aprendizaje automático y profundo. En ese sentido, la labor de los ingenieros es alimentar al programa, esto con la finalidad de que sea capaz de generar soluciones.

Foto: iStock

Una vez que el programa es alimentado, la inteligencia artificial tendrá la capacidad de desarrollar soluciones de manera autónoma, es decir, ya no será necesario que un humano intervenga.

Ahora bien, los investigadores de Google llegaron a la conclusión de que la inteligencia artificial creada por otra inteligencia artificial suelen tener ciertas características de diseño que parece que no tienen un uso claro.

Por ejemplo, añaden una herramienta que no saben si son eficientes o no, aún así, la nueva inteligencia artificial es capaz de analizar palabras hasta difundir imágenes.

Cabe señalar que los ingenieros del gigante tecnológico pasaron meses analizando la capacidad que tiene el sistema AutoML para procesar y recoger imágenes, y encontraron cuenta con un nivel de presión que nunca antes había alcanzado una máquina.

No obstante, la inteligencia artificial “hija” es capaz de analizar conjuntos de catálogos de palabras e imágenes a color con una precisión mucho mayor que la que tiene la IA “madre”.