Maricarmen Cortés

Desde el piso de remates

Maricarmen Cortés

12 Nov, 2018

Sindicato de Bancomext inicia defensa

 

El expresidente Felipe Calderón intentó en su administración fusionar a Nacional Financiera con Bancomext y el primer paso fue nombrar a un director general para ambos bancos: Mario Laborín, quien en noviembre de 2008 fue sustituido por Héctor Rangel Domene.  Aunque había un sólo director general, nunca se pudo en la práctica concretar la fusión por dos problemas principales: Calderón no obtuvo el apoyo del PRI para modificar el marco jurídico, ni de los sindicatos de Nafin y Bancomext.

Andrés Manuel López Obrador y el secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, además de volver a intentar la fusión de Nafin y Bancomext, que serán dirigidos por Eugenio
Nájéra, empresario muy cercano a Alfonso Romo, pretenden también fusionar a Banobras con Sociedad Hipotecaria Federal bajo la batuta de Jorge Mendoza, actual director Corporativo de Finanzas de la Comisión Federal de Electricidad.

Desde luego, ya se prendieron las señales de alerta no sólo entre los sindicatos de la banca de desarrollo, sino en el sector empresarial, en especial de las constructoras y de  vivienderas que temen una nueva crisis en vivienda al inicio de sexenio por cambio de reglas.

El más aguerrido de los sindicatos en la banca de desarrollo es el de Bancomext, que encabeza José Flores Morales, quien además de ser secretario general del SINUDET Bancomext, es presidente colegiado de la Federación Nacional de Sindicatos de la Banca de Desarrollo, quien organiza mañana en el Senado, un Foro sobre la “Importancia de la Banca de desarrollo, el caso de Bancomext”.

No será tan fácil para el SINUDET lograr, como en el sexenio de Calderón, el apoyo del Congreso para impedir la fusión de Bancomext y Nafin, pero darán la lucha. En el Foro participarán Francisco Hernández Juárez, líder del Sindicato de Telmex, y Arturo Alcalde, abogado laboral muy cercano a López Obrador, padre de la futura secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde y asesor del sindicato de Bancomext.

LÓPEZ OBRADOR TRANQUILIZÓ A LOS MERCADOS

El Premio Naranja Dulce es para el presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, quien tuvo que salir el viernes a tranquilizar a los mercados después de la estrepitosa caída que registraron el día anterior por la iniciativa que presentó el senador Ricardo Monreal en la que se pretende eliminar comisiones de varios servicios bancarios lo que desplomó al peso, a las acciones de los bancos y a la Bolsa Mexicana de Valores.

López Obrador aseguró que en el nuevo gobierno no habrá ninguna modificación al marco legal en materia económica o fiscal, al menos —dijo— en los tres primeros años de su gobierno. Aunque dejó abierta la puerta para futuros cambios que, seguramente, dependerán de la evolución de la economía y, sobre todo, del cumplimiento en sus ambiciosas metas sociales.

RICARDO MONREAL NO ACEPTA SU ERROR

El Premio Limón Agrio de la semana, evidentemente, es para el senador de Morena, Ricardo Monreal, porque a pesar del desplome de los mercados por la iniciativa que presentó para prohibir comisiones de varios servicios bancarios, y de las críticas generalizadas del sector privado y del propio presidente electo, insiste en defender su propuesta. En lugar de reconocer su error que muchos llaman ahora el “error de noviembre”, Monreal intenta minimizar la reacción de los mercados; asegurar que su iniciativa no será congelada y que comisiones bancarias deben bajar por decreto.

El futuro secretario de Hacienda, Carlos Urzúa, la noche del jueves leyó un comunicado en el que pidió una mayor coordinación al Congreso para analizar el impacto económico de iniciativas de carácter fiscal y financiero y que no afecten ni la estabilidad macroeconómica, el manejo responsable de las finanzas públicas, y se mantenga el irrestricto respeto a la autonomía del Banco.

La iniciativa de Monreal no cumple con ninguno de los tres porque es Banxico quien regula a los bancos; porque la depreciación del peso y la caída en los mercados afecta la estabilidad, y también a las finanzas públicas, ya que el riesgo es generar mayores tasas de interés que eleven el costo de la deuda pública. Además la volatilidad en los mercados afectará los rendimientos de las afores como sucedió en octubre.

La respuesta de Monreal al decir que no acepta regaños de nadie, que el Senado es autónomo y que deben bajar las comisiones bancarias por ley. De plano no entiende que no entiende.

 

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