Turismo: retrocedió un billón de pesos en consumo

Devastador panorama para el sector turístico planteó ayer Braulio Arzuaga, presidente del Consejo Nacional Empresarial Turístico (CNET), al presentar el estudio sobre claves para la recuperación de la industria turística realizado por el Cicotur, el Centro de Investigación y Competitividad Turística Anáhuac, que dirige Francisco Madrid.

Para 2020, estiman un retroceso en el consumo turístico en México superior al billón de pesos, con una caída de 55% en llegadas de turistas a hotel, y de 45.9% en número de turistas internacionales.

El problema, como resaltaron Arzuaga y Madrid al presentar el estudio, es que el panorama tampoco pinta bien para 2021. En estimaciones preliminares del Cicotur que, desde luego, dependen de factores como el avance en las vacunas y medidas de confinamiento, se estima un incremento en ingresos de divisas de 24.1% vs. 2020, que implicaría un retroceso de 44.5% frente a 2019. En las llegadas de turistas internacionales, aunque estiman un crecimiento de 10.9% vs. 2020, habría una caída de 40% frente a 2019.

Incluso en el turismo nacional la expectativa también es negativa porque esperan un crecimiento de 27.6% en hospedaje en hotel, lo cual sería 46.2% inferior a 2019.

QUÉDATE EN MÉXICO

Impulsar el turismo nacional con una campaña exhortando a quedarnos en México es una de las claves que presentó el CNET para la recuperación del sector.

Proponen también otras medidas, como fortalecer protocolos sanitarios, asegurar la conectividad aérea, poner a los trabajadores del sector en los primeros lugares de procesos de vacunación, canalizar recursos del impuesto al hospedaje para la promoción turística y medidas legislativas para apoyar la recuperación del sector.

El problema es que estas propuestas requieren el apoyo del gobierno, que una y otra vez ha demostrado que no está dispuesto a apoyar a empresas de ningún sector.

CLOUTHIER: BUENAS INTENCIONES

A lo mejor es porque acaba de llegar al gobierno o porque realmente es optimista y bien intencionada, pero la secretaria de Economía, Tatiana Clouthier, tiene propósitos muy difíciles de cumplir.

Al participar en la reunión del Consejo Directivo de Canacintra, que preside Enoch Castellanos, dijo que apoyará al sector privado para la reapertura de sus actividades y que en lugar de hablar de empresas esenciales que sí pueden abrir en semáforo rojo, se cambie a empresas seguras por sus protocolos sanitarios.

El problema es que las aperturas no dependen de la Secretaría de Economía, sino del subsecretario de Salud, Hugo López-Gatell, y pese a protocolos sanitarios en empresas no esenciales, la recomendación ante el elevado número de contagios es quedarnos en casa. Además, a López-Gatell no le debe haber gustado que Clouthier se comprometiera a apoyar a los empresarios a que participen en el proceso de vacunación y que haya criticado la lenta aplicación de las vacunas. Reiteró que buscará reunirse no sólo con la Secretaría de Hacienda, sino también con legisladores para aprobar estímulos fiscales. Sin embargo, a quien tendría que convencer es al presidente López Obrador.

Aseguró que hay “importantes avances” en la negociación sobre outsourcing y reparto de utilidades tras la cena que sostuvo el viernes López Obrador con empresarios de Monterrey. Pero tampoco depende de Economía, sino de la secretaria del Trabajo, Luisa María Alcalde, quien quiere enviar la iniciativa preferente la próxima semana.