Lo que debes saber antes de contratar un seguro médico

CIUDAD DE MÉXICO.- A pesar de las acciones del gobierno federal para que la mayoría de la población cuente con servicios de salud con programas universales, de acuerdo con un estudio de la Fundación Mexicana para la Salud (Funsalud), poco más de la mitad del gasto total en salud continúa siendo financiado con recursos privados, principalmente a través de gasto de bolsillo.

El gasto de bolsillo es aquel que realizan las personas para consultas, estudios y compra de medicamentos y que tienen que tomar de su presupuesto de gastos fijos como alimentación o transporte. Una opción para prevenir ese desfalco en tu presupuesto es contar con un Seguro de Gastos Médicos Mayores (SGMM), generalmente se piensa que estas pólizas son especialmente caras.

Sin embargo, la buena noticia es que el sector asegurador ha puesto atención en ese detalle y han flexibilizado sus productos, así como los plazos para pagarlos.

Términos que debes conocer sobre el seguro

• Periodo de espera. Lapso de tiempo establecido en la póliza, a partir de la contratación del seguro, durante el cual la aseguradora no cubre los gastos por la atención o tratamiento médico de ciertas enfermedades o padecimientos.
• Deducible. Es una cantidad de dinero a partir de la cual la aseguradora empieza a pagar el monto de la reclamación. La aseguradora no pagará accidentes o enfermedades cuya atención o tratamiento implique un monto menor al deducible.
• Coaseguro. Es un porcentaje del total del monto que la aseguradora haya considerado como procedente para la atención o tratamiento derivado de un padecimiento, una vez que ha sido descontado el deducible. Este porcentaje también lo pagará el asegurado.

Las letras pequeñas

Según Héctor Antonio Zazueta, jefe de la Unidad de Negocios de Mapfre, es vital saber las características que no cubren la mayoría de los SGMM:

• Preexistencia. Se refiere a que si al momento de comprar una póliza el asegurado tiene una enfermedad ya declarada, ésta no será cubierta. Generalmente deben de pasar un periodo de espera. Dependiendo del padecimiento y de la aseguradora es como se determina ese lapso. En algunas ocasiones es de seis meses, en otras de un año.
• Embarazo. Si una mujer descubre que está embarazada y decide contratar una póliza porque quiere que ésta cubra los gastos del parto o cesárea, la mala noticia es que no podrá ser así, generalmente el tiempo de espera para que pueda ser válida es de 12 meses, aunque algunos seguros de gastos médicos mayores podrían tener una cobertura para la gestación.
• Procedimientos estéticos. De manera general las pólizas no cubren cirugías plásticas. En algunos casos y cuando se hubiera detectado cáncer de mama, por ejemplo, hay un seguro en el mercado que sí ayuda en la reconstrucción del seno, pero a excepción de ese caso no se cubren cirugías estéticas.

Temor a lo desconocido

Héctor Antonio Zazueta, responsable de la Unidad de Negocios de Personas de Mapfre, comentó que la compañía sabe que existe un enorme potencial en el sector asegurador para concientizar a la población sobre la importancia de prevenir con un seguro.

Por ello han decidido acercarse más a la población para que conozcan los beneficios de los seguros de gastos médicos mayores, además de hacerlos más flexibles para derribar los mitos sobre que son caros y que sólo son para estratos sociales altos.

Además, Mapfre quiere romper paradigmas con su seguro de gastos médicos mayores, para ello en su cobertura, después de dos años, puede cubrir los gastos de una enfermedad preexistente al adquirir su seguro.

Además de cubrir gastos por hospitalización. Si la persona está unas horas en el hospital el seguro lo cubre. Su cobertura puede ser ampliada con planes adicionales de servicios básicos dentales o de visión. Permite que se cubran tratamientos con medicina alternativa como acupuntura y homeopatía.

En qué te debes fijar

• Experiencia. En la solidez del grupo que atenderá tus necesidades de protección, incluso puedes preguntar a otros clientes cómo ha sido su experiencia.
• Transparencia. Básico que te otorguen la información, si no contestan alguna duda es importante reflexionar sobre el servicio. Además de que puedas encontrar fácilmente la información; en su sitio de internet, por ejemplo.
• Economía. Que más allá de un costo, barato o caro, te explique de manera que entiendas qué cubre y qué se excluye de la cobertura y se adecue a tus necesidades; en resumen, que sea flexible.

El link

Una herramienta que puedes utilizar para elegir a tu aseguradora es El Calificador de la Condusef, que como su nombre lo indica califica los servicios de las firmas del sector.

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