Revelando el carácter

Tragedias como el huracán Otis revelan, no únicamente el carácter de quienes están en la primera línea de responsabilidad, sino también el carácter de las instituciones. Es intención del Padre del Análisis Superior hacer un análisis del carácter revelado.

A pesar que hace unos días el PAS le advertía sobre la intención de ciertos grupos del gobierno por lanzar una ofensiva en contra de la banca, la Asociación de Bancos de México, presidida por Julio Carranza, se coordinó con el Banco de México y la Secretaría de Hacienda (encabezados respectivamente por Victoria Rodríguez y Rogelio Ramírez de la O) la aplicación desde el primer minuto del Plan Billetes a través de la Sedena.

Para el viernes ya habían negociado con la CNBV la aplicación de normas contables que permiten dar apoyo a los clientes afectados por la tragedia. Como se lo informó el PAS en Imagen Televisión desde el viernes, este programa trata de que los bancos estén en posibilidad de dar ayudas específicas a sus clientes porque la CNBV, presidida por Jesús de la Fuente, les da facilidades regulatorias.

La circular, emitida el viernes por la tarde, aplica para clientes que tengan su domicilio o su fuente de ingresos en la zona afectada y que podrán consistir en quitas, aumento de plazo o una combinación. Ya para el domingo, el subsecretario de Hacienda, Gabriel Yorio, hizo públicas las facilidades regulatorias que en su momento también habían sido informadas por la CNBV.

El sábado, HSBC, presidido por Jorge Arce, anunció que sus clientes de créditos personales, de nómina, hipotecario, automotriz, tarjeta de crédito o pyme tendrán el diferimiento hasta por seis meses de sus créditos. Es de esperarse que a partir de hoy se conozcan con detalle los programas de otras instituciones de crédito.

Estas medidas se suman a otras como la de BBVA México, dirigido por Eduardo Osuna, que ofreció aportar hasta 59 millones de pesos en capital semilla para el momento que inicie la recuperación de Acapulco.

REMATE INFRAESTRUCTURA

Mientras que algunos en el gobierno se han dedicado a disputas con los que llaman opositores o los medios de comunicación y otros han tratado de hacer propaganda política con sus acciones, dentro del propio gobierno federal hay quienes han actuado con gran responsabilidad.

En las antípodas de Abelina López, la presidenta municipal de Acapulco que calificó la rapiña como un acto de cohesión social, están funcionarios como Jorge Nuño, quien ha logrado una gran coordinación en todo lo que tiene que ver con su sector.

En un lapso corto logró que la carretera México-Acapulco volviera a funcionar. Encontró la manera en que las tres principales líneas aéreas: Aeroméxico, VivaAerobus y Volaris (encabezadas respectivamente por Andrés Conesa, Juan Carlos Zuazua y Enrique Beltranena) pudieran establecer puentes humanitarios.

Nuño no lo hizo desde el discurso, sino que además se coordinó con el Sindicato Nacional de Controladores de Tránsito Aéreo, que tiene como secretario a José Alfredo Covarrubias, y el Senam, dirigido por Javier Vega, para que pudieran recuperar la operación de la terminal aérea de Acapulco con la puesta en operación de la torre de control.

REMATE COMUNICADO

Telmex y Telcel, encabezadas por Carlos Slim, con gran rapidez pusieron en operación una serie de acciones que arrancan con la prevención, antes de la tragedia la Fundación Telmex ya había movilizado apoyos de urgencia para la población civil y un trabajo muy eficiente para reconectar las comunicaciones.

A diferencia de CFE, dirigida por Manuel Bartlett, no perdieron el tiempo poniendo a sus voceros a decir lo buenos y eficientes que son sus trabajadores –aun cuando no haya recuperado la mitad de la energía eléctrica en la zona afectada– ni a quejarse del tamaño de la tragedia.

El Presidente garantizó que hoy se restablecerá el servicio eléctrico y que el martes todas las viviendas del puerto tendrán suministro eléctrico. Hasta que eso ocurra podrá mandar CFE a sus voceros a recolectar aplausos.

La empresa de Slim ya anunció programas de apoyo económico a sus clientes y puso a disposición de toda la población su infraestructura de comunicaciones. Una medida muy similar hizo Totalplay de Ricardo Salinas.

El IFT, presidido por Javier Juárez, logró una gran coordinación con los concesionarios de telefonía satelital, de banda civil y, en general, con todo el sector para que se pudiera tener una mucho mayor rapidez en la comunicación. En menos de tres días los radiodifusores logran levantar sus antenas y regresar a la operación.