Uno de los estados más pobres del país tiene la mejor escuela pública
Que Guerrero tenga a la mejor primaria pública del país no significa que todo está hecho
Que Guerrero tenga a la mejor primaria pública del país no significa que todo está hecho
CIUDAD DE MÉXICO.- Si bien México tiene mucho qué hacer en materia educativa, la realidad es que ha habido esfuerzos por parte de los diferentes actores involucrados. Maestros, estudiantes, sociedad civil y gobierno han logrado resultados conjuntos que vale la pena mencionar.
Guerrero es un buen ejemplo de ello. A pesar de ser uno de los estados más pobres del país (la participación de Guerrero en el PIB nacional disminuyó ligeramente en el periodo 2003-2014) y con marcados problemas sociales, hoy por hoy ha logrado progresos en materia educativa.
De acuerdo con el portal Mejoratuescuela.org, Guerrero tiene a la mejor escuela primaria pública del país. Se trata de la Escuela Primaria Lázaro Cárdenas. Ubicada en el municipio Coahuayutla De José María Izazaga, en La Soledad (Huaracio), Guerrero. Cuenta con 12 alumnos. En la prueba ENLACE el turno matutino es calificado como “Excelente”.
Aquí puedes conocer las otras 9 mejores primarias públicas del país.
¿Qué hay detrás de esa escuela? A continuación, te presentamos algunos avances del estado si de educación hablamos:
En Guerrero se han hecho esfuerzos significativos para alcanzar la cobertura universal en los niveles de la educación básica. La información de la Encuesta Intercensal del Inegi corrobora este hecho. Por ejemplo en 2015, el 95.7% de la población de 6 a 14 años va a la escuela. Hace 15 años sólo era l 88.4% de la población en estas edades, lo que implica un incremento de 7.3 puntos porcentuales.
Y un gran dato a destacar: El aumento es mayor en las mujeres con 7.8 puntos; mientras que para los hombres es de 6.8 en el mismo periodo de referencia.
Además, el porcentaje de asistencia a la escuela de los niños y niñas de 3 a 5 años, alcanza su nivel máximo en las áreas de 15 mil a menos de 100 mil habitantes. La asistencia de niñas es mayor a la de niños en todas las localidades y es en las de 100 mil y más habitantes, en donde se tiene la mayor diferencia, con 3.1 puntos porcentuales.
La tasa de analfabetismo (que es la población de 15 años y más que no sabe leer ni escribir) es un indicador relacionado con condiciones básicas en el nivel de bienestar de la población. Una persona analfabeta se encuentra al margen del desarrollo de una sociedad.
Debido al incremento de la cobertura de la educación básica y a las acciones establecidas para erradicar el analfabetismo entre la población de la entidad, la tasa disminuyó casi ocho puntos porcentuales entre 2000 y 2015. En 2000, 21.5% de las personas de este grupo de edad, no sabía leer ni escribir y en 2015 este indicador se redujo a 13.6 por ciento.
Desde una óptica generacional, la tasa de analfabetismo es diferencial y muestra los patrones educativos del pasado, así como el incremento en las oportunidades y los avances en el desarrollo social que se reflejan en cada nueva generación.
En 2015, para los hombres y las mujeres de 15 a 29 años, esta tasa es de 3 y 3.1% respectivamente. Sin embargo, conforme aumenta la edad, la tasa de analfabetismo incrementa y ésta es mayor entre las mujeres, lo que refleja la marginación en que vivían. La diferencia entre hombres y mujeres en las edades de 75 años y más es de 11.2 puntos porcentuales.
Uno de los indicadores básicos del nivel educativo de la población y su potencialidad para avanzar hacia mejores condiciones de vida, es el número de años de escolaridad que logra alcanzar su población. El promedio de escolaridad de las personas de 15 años y más, es clara evidencia del camino hacia la cobertura universal en la educación básica y la educación media superior. En Guerrero, el promedio de esta población pasó de 6.1 años en 2000 a 7.8 en 2015, es decir, actualmente se tiene el equivalente al segundo año de secundaria.
Así, si lo vemos de forma global, de cada 100 personas en el estado:
Que Guerrero tenga a la mejor primaria pública del país no significa que todo está hecho. Aún hay mucho por delante. Por ejemplo, aunque los años de escolaridad cursados aumentaron del 2000 al 2015, no es suficiente. El promedio del país es de 9.2 años de asistencia, lo que por lo menos dejaría la educación secundaria cubierta.
También el analfabetismo es un fenómeno que hay que atacar, aunque es cada vez menos. El dato a nivel país es que 94 de cada 100 personas están alfabetizadas. A Guerrero le faltan todavía 8 personas más que educar.
*livm