Autos eléctricos y autónomos podrían llevar a los fabricantes a la quiebra

La industria automotriz está comenzando una reconfiguración derivada de la adopción de nuevas tecnologías, como las redes de Quinta Generación (5G), que obligará a los fabricantes e, incluso, a los operadores de telecomunicaciones, a hacer nuevos planes para aprovechar este cambio y no quedarse atrás.

De acuerdo con Richard Windsor, fundador de Radio Free Mobile, los automóviles se están digitalizando desde hace varios años gracias a la integración de procesadores y el número de éstos que se utilizan en los vehículos crecerá sustancialmente en la próxima década.

A esto se añade la tendencia por automóviles más amables con el medioambiente, es decir, una mayor producción de coches eléctricos y, más a futuro, aquellos capaces de conducción autónoma.

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Uno de los impactos de la electrificación y conducción autónoma es que el número de automóviles vendidos disminuirá sustancialmente”, advirtió al participar en el foro MediaTek Mobile Latam Congress 2022.

Lo anterior se debe a que dicho tipo de automóviles requiere menos mantenimiento y, a la larga, es más barato que uno de gasolina.

Para Windsor, esto representa una amenaza para el futuro de las empresas automotrices porque si la demanda de vehículos cae, se prevé que hasta 60%, muchas compañías que fabrican autos saldrán del negocio y entrarán en quiebra.

Una forma de sobrevivir a ese escenario es que los fabricantes comiencen a reemplazar las ventas de vehículos por servicios.

Lo que se está viendo es que los autos se están volviendo más eléctricos y con más servicios disponibles. Esto gracias a que el vehículo recopila, analiza y categoriza más datos, teniendo un mayor conocimiento del entorno y permite todo tipo de nuevos servicios”, agregó el fundador de la consultora.

Por ejemplo, relató que ya existe un servicio que es capaz de determinar la ruta que una persona toma cada mañana en su auto para llegar al trabajo y encuentra, en un radio cercano, un lugar d estacionamiento disponible.

Este tipo de servicios incluso representan una oportunidad para los operadores de telecomunicaciones que, en su momento, no lograron entrar de lleno al potencial de negocio de los teléfonos inteligentes.

El gran reto para los fabricantes, según Windsor, es que no tienen grandes conocimientos en el desarrollo de servicios o experiencias digitales y empresas como Google o Apple van por delante en la creación de ecosistemas que funcionan dentro del auto.