¿Sigues dietas de influencers? Tal vez cometes un grave error

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El auge de las redes sociales ha generado un fenómeno que lejos de ser una ayuda, en ocasiones suele resultar todo lo contrario: me refiero a los llamados health coach. Foto: Pixabay.
El auge de las redes sociales ha generado un fenómeno que lejos de ser una ayuda, en ocasiones suele resultar todo lo contrario: me refiero a los llamados health coach. Foto: Pixabay.

Por: Mayra Moreno Flores, docente de la licenciatura en Nutrición de la Universidad Valle del Grijalva, campus Tuxtla

Sin duda, algunos de los problemas más recurrentes a los que nos hemos enfrentado durante esta pandemia, es el tema de nuestra alimentación y el aumento de peso originado por la poca actividad física que logramos tener dentro de nuestra casa. Hay que sumarle los fuertes niveles de estrés y ansiedad que las personas están experimentando, ocasionados por las condiciones en las que nos hemos visto obligados al implementar el trabajo desde casa.

En estas circunstancias, el auge de las redes sociales ha generado un fenómeno que lejos de ser una ayuda, en ocasiones suele resultar todo lo contrario: me refiero a los llamados health coach. Instagram es, principalmente, la plataforma que estos influencers y líderes de opinión utilizan para dar una serie de consejos nutricionales que pueden ser perjudiciales a la salud de quienes los siguen y, en estos tiempos de pandemia, pueden generar daños graves a su bienestar.

También, encontramos esa parte donde los influencers promocionan X o Y producto porque son parte de su campaña publicitaria, muchas veces sin considerar si en verdad es saludable o no. Casos en el que celebridades recomiendan en sus videos cómo hacer unas “enchiladas healthy” sustituyendo las tortillas por jamón de pavo, argumentando que esta opción es más saludable. Y aquí, sin duda, se comete un grave error, dado que un embutido tiene una gran parte de almidón, sal, sodio y un alto aporte calórico.

Otra muestra de desinformación es una receta para realizar un postre sin carbohidratos, donde el principal ingrediente es una fruta (como un plátano), siendo ésta una fuente de hidratos de carbono simples. La recomendación es elegir en mayor proporción los hidratos de carbono complejos, que son aquellos que nos aportan mayor cantidad de fibra, como: cereales integrales (avena de grano entero, arroz integral, trigo) leguminosas, frutas y verduras que se consuman con cáscara o bagazo.

Igualmente, no podemos dejar de lado los jugos détox y las dietas con prolongados ayunos o ayunos intermitentes que son promovidas para “desintoxicar” el cuerpo, cuando éste ya lo hace a través del hígado, sin necesidad de realizar este tipo de soluciones. Además, carecen de evidencia científica que avale que estas técnicas de reducción de peso o “desintoxicación” realmente funcionen.

Sin duda alguna, hay muchos otros ejemplos como los anteriores. Sin embargo, es importante destacar que la alimentación saludable es fundamental para una óptima salud; una buena dieta se caracteriza por equilibrar la ingesta de alimentos y nutrientes que nos aporten vitaminas, minerales, grasas saludables, proteínas e hidratos de carbono.

Por otro lado, este tipo de consejos sin argumentos científicos pueden ocasionar daños emocionales relacionados a la culpa, a la ansiedad y a la inseguridad, debido a que no se obtendrán óptimos resultados, aunados al estrés de estar en cuarentena y que pueden agravar la salud de quienes siguen sus recomendaciones.

En este tiempo de cuarentena, lo ideal es que se consuman alimentos ricos en vitaminas y minerales, éstas las podemos encontrar mayormente en las frutas, verduras y hortalizas; la recomendación es incluir en la dieta diaria 3 porciones de verduras y 2 porciones de frutas, las cuales nos ayudan a reforzar el sistema inmune. Incluir carnes magras (sin grasa), de preferencia dos a tres veces por semana, inclinándose más por las carnes blancas, como aves y pescado; los lácteos deben incluirse dos a tres veces por semana, de preferencia descremados o bajos en grasa dado que estos nos aportan calcio y proteína; también las leguminosas y cereales que son buena fuente de proteínas e hidratos de carbono complejo, tomar agua simple, tés, agua mineral o café sin azúcar.

Lo ideal es mantener un régimen diario equilibrado, realizar ejercicio moderadamente desde casa para ayudar a nuestro cuerpo a estar en movimiento y sano, reforzando nuestro sistema inmune con una alimentación saludable.

Asimismo, para bajar de peso, lo recomendable, siempre, es acudir con nutriólogos o médicos especializados que puedan apoyar en este proceso. Recordemos que bajar de peso depende de muchos factores y no es solamente reducir calorías o dejar de comer ciertos alimentos, sino revisar el historial del paciente, hábitos alimentarios, la existencia de alergias alimentarias, enfermedades genéticas, estilos de vida, ocupación, actividad física, etc. Cuidar de nuestra salud y de nuestro cuerpo debe hacerse de forma integral.

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Jbf

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