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El gobierno de Canadá ha decidido unirse y apoyar a Estados Unidos en las consultas para resolver las controversias generadas por los cambios en materia de energía por parte de México.
Ambos países coinciden en que las políticas que actualmente se implementan en México van en contra de los estipulado en el T-MEC, pues han sido catalogadas como discriminatorias.
Es importante mencionar que la presente administración ha hecho una serie de cambios en la normatividad vigente del sector eléctrico y de hidrocarburos, esto con el objetivo de dar mayor apoyo y fortaleza a Pemex y la CFE.
Según una agencia internacional de noticias, desde la Comercio Internacional de Canadá que dirige Mary Ng, se considera que México está siendo inconsistente con las obligaciones que adquirió al firmar el Tratado comercial.
Por ello, “nos estamos uniendo a Estados Unidos en la toma de medidas mediante el lanzamiento de nuestras propias consultas en el marco del TMEC para abordar estas preocupaciones, al tiempo que apoyamos a Estados Unidos en su desafío”.
Según el Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco), México está incurriendo en diversas violaciones al Tratado, pues ha dejado de otorgar “trato nacional” a las mercancías de sus socios comerciales, además con los cambios a la regulación no sólo elimina las expectativas que originalmente se ofrecieron a los inversionistas, sino que han dejado de ser uniformes, imparciales y razonables, pues su verdadero objetivo es dar un trato favorable a las empresas de Estado.
De no llegar a un acuerdo respecto al rumbo de la política energética de México y su implementación, el siguiente paso sería el establecimiento de un panel de solución de controversias, en el que el país corre el riesgo de enfrentar represalias comerciales”.
En entrevista, Óscar Ocampo, coordinador de Energía del Imco, aseguró que México tiene una mayor posibilidad de perder si se inicia una controversia legal, pues las acciones del gobierno mexicano han puesto en riesgo inversiones y proyectos estadunidenses con un valor cercano a los 10 mil millones de dólares, a lo cual se sumaría valor de los posibles daños causados a las empresas canadienses.
Manifestó que, en caso de que no se llegue a un acuerdo durante los paneles, es posible que en el futuro al país se le impongan sanciones económicas que perjudiquen su actividad comercial, es decir, el cobro de aranceles a sus principales productos de exportación hacia la región de Norteamérica.
La Secretaría de Economía (SE) recibió la solicitud de Estados Unidos para iniciar Consultas con relación a la política energética de México, de conformidad con lo establecido en el artículo 31.4 del Tratado México, Estados Unidos, Canadá (T-MEC).
El país vecino considera que las políticas implementadas por el gobierno federal socavan a las empresas estadunidenses y favorecen a las empresas del estado como Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad (CFE).
Estados Unidos impugna una enmienda de 2021 a la Ley de la Industria Eléctrica en México que prioriza la electricidad producida por CFE sobre la electricidad generada por todos los competidores privados. Así como la inacción, demoras, denegaciones y revocaciones de México de las capacidades de las empresas privadas para operar en el sector del país. Además, una regulación de diciembre de 2019 que otorga sólo a Pemex una prórroga para cumplir con los requisitos de contenido máximo de azufre según la norma de combustible diésel para automóviles aplicable en el país. También una acción de junio de este año que favorece a Pemex y CFE en el uso de la red de transporte de gas natural.
Estas medidas parecen ser inconsistentes con varias de las obligaciones de Juan Carlos Baker, exsubsecretario de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía y negociador del T-MEC.
México bajo el T-MEC, incluso bajo los capítulos de Acceso al Mercado, Inversión y Empresas de Propiedad Estatal”, indicó la Oficina del Representante Comercial de los Estados Unidos (USTR, por sus siglas en inglés).
Estados Unidos agregó que México prioriza la distribución de energía generada por CFE sobre fuentes de energía limpias proporcionadas por proveedores del sector privado, como la eólica y la solar.
Al respecto, la Secretaría de Economía destacó que, partir de este momento, ambos países tienen un periodo de 75 días para solucionar la controversia.
En caso de no llegar a un acuerdo mutuamente satisfactorio sobre la correcta aplicación en interpretación de estas disposiciones, Estados Unidos podría solicitar el establecimiento de un panel para que decida sobre este asunto”.
No debería extrañar que EU solicite consultas de resolución de disputas con México bajo el T-MEC, por considerar que la política energética mexicana viola el acuerdo comercial al dar un trato injusto a las empresas estadunidenses y favorecer tanto a la CFE como a Pemex, consideró Juan Carlos Baker, exsubsecretario de Comercio Exterior de la Secretaría de Economía y negociador del T-MEC.
Nadie se puede decir sorprendido, en ocasiones previas, a todos los niveles, distintos actores, se había expresado una preocupación muy fuerte por la política energética que la administración actual en México estaba tratando de implementar, ya que esa política se estaba aplicando en detrimento de empresas en este caso estadunidenses, pero también de otras nacionalidades porque estaba privilegiando empresas del Estado”.
El también CEO y socio fundador de Ansley Consultores, proyectó en entrevista para la Primera Emisión de Imagen Informativa con Pascal Beltrán del Río, que, si el panel de controversias resolviera que EU está en lo correcto, México “debería cambiar esas leyes y decretos que privilegian a la CFE y a Pemex por encima de privados, México tendría 45 días para cumplir esa resolución”.
Advirtió que, si el gobierno mexicano no las modifica, Washington está en la posibilidad de aplicar sanciones como agregar aranceles.
No más allá de junio de 2023, México tendría que hacer las modificaciones para estar en cumplimento con el panel. Si México no cambia esas legislaciones, Estados unidos está en la posibilidad de incrementar aranceles a las exportaciones mexicanas”.
Un panel de controversias comerciales en energía, bajo el T-MEC, afectará la confianza para los inversionistas extranjeros, incluso México podría tener sanciones como aranceles a las exportaciones, dijo Ernesto O’Farril, presidente de Bursamétrica.
Para el presidente de la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin), José Abugaber, la solicitud no sólo afecta la imagen de país respetuoso de los acuerdos que suscribe, sino que además podría dar paso a que se afecten los beneficios que se tienen con las exportaciones de México a Estados Unidos con la aplicación de aranceles y otras medidas.
Debemos apostar por que la imagen de nuestro país ante el mundo sea intachable, y al mismo tiempo mantener y tratar las relaciones comerciales con otros países con seriedad. Nadie por encima de lo que marcan los tratados internacionales, si hay incumplimientos a dichos instrumentos, que se activen las instancias establecidas, ésa es la vía”, dijo el líder industrial.
La Coparmex, que dirige José Medina Mora, expresó que con la controversia, hay riesgo de sanciones millonarias y pérdida de más inversiones para el país.
El CCE, que dirige Francisco Cervantes, expresó que “estaremos pendientes del diálogo de los gobiernos para resolver este diferendo, y reiteramos nuestra disposición a colaborar y apoyar al gobierno mexicano”.
Por: Nayeli González, Miriam Paredes y Lindsay H. Esquivel
-LECQ
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