Mexicanos pierden 3 días de poder adquisitivo por la alta inflación

El analista económico, Raymundo Tenorio Aguilar, explicó que el esfuerzo de los hogares se ha centrado en no dejar que la inflación deje sin comer a sus integrantes.
Economía -
Dos mujeres realizan la compra de verduras en un mercado popular y un hombre pasa caminando.
El analista económico, Raymundo Tenorio Aguilar, explicó que el esfuerzo de los hogares se ha centrado en no dejar que la inflación deje sin comer a sus integrantes. Foto: Cuartoscuro

La espiral inflacionaria ha recortado hasta 1.5 días de consumo a la quincena de los mexicanos o tres días al mes, de acuerdo con el analista económico y profesor emérito del Tecnológico de Monterrey, Raymundo Tenorio Aguilar. 

La inflación anual alcanzó 8.16% en la primera quincena de julio, la variación más alta de los últimos 21 años en México, mientras que el índice de precios de la canasta de consumo mínimo, mejor conocida como canasta básica aumentó casi 10%; el cual ha llevado a un periodo de 30 días arroja tres días menos de gasto al mes y 1.5 días a la quincena”. 

El especialista señaló que, con base en la última Encuenta Nacional sobre Confianza del Consumidor, el esfuerzo de los hogares se ha centrado en no dejar que la inflación deje sin comer a sus integrantes; obligándolos a cancelar el desembolso en servicios de entretenimiento, recreación y electrodomésticos. 

De acuerdo con el levantamiento de precios que mes a mes realiza Excélsior, el conjunto de los 33 productos considerados mínimos indispensables en la dieta de las familias mexicanas por el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval) reportó un alza acumulada de 4.5% durante los primeros siete meses de 2022. 

Las estadísticas indican que en diciembre de 2021 se necesitaron mil 958 pesos con 50 centavos para adquirir la canasta alimentaria, cantidad que se elevó a dos mil 46 pesos en julio de este año. 

El producto que reportó una mayor alza en mercados y tiendas de autoservicio en los últimos sietes meses fue la naranja, que pasó de 22 pesos con 90 centavos el 31 de diciembre de 2021 a 36 pesos con 90 centavos el 31 de julio de 2022, lo que significó un avance de 61.1 por ciento. 

Le siguió la pechuga de pollo, cuyo kilo transitó de 98 a 134 pesos en los primeros siete meses del año, mientras que el huevo pasó de 34 a 44 pesos en este mismo periodo, lo que significó un avance de 29.4 por ciento. 

Tenorio Aguilar consideró probable que la inflación cierre el año en alrededor de 7.0 o 7.5%, “pero ojo, esto no significa que los precios bajarán, sino que disminuirá su velocidad de crecimiento”. 

Anticipó que los precios podrían regresar al nivel de 2021 hasta el primer trimestre de 2023. La pregunta clave es: ¿Acaso la inflación en México es importada?

Familias ajustan gastos 

Ante la pérdida del poder adquisitivo, las familias se han visto en la necesidad de establecer prioridades de consumo. Aquí te compartimo 4 tips para evitar la inflación y hacer rendir tu dinero

Dijo que la estrategia para no afectar la alimentación de los miembros del hogar ha sido reducir la frecuencia con la que se va al cine o se realizan comidas fuera de casa, asimismo se han modificado las vacaciones. 

Este verano muchas familias en lugar de irse cinco días de vacaciones, se fueron sólo tres, o en lugar de visitar Puerto Vallarta optaron por Acapulco, incluso hubo quienes cambiaron su medio de transporte al optar por autobús en lugar de avión. Todo es en función del ingreso”. 

Dijo que las familias deben de tener cuidado con endeudarse buscando mantener el mismo nivel de vida que tenían porque hacia adelante se pueden enfrentar complicaciones para enfrentar los pagos. 

Se debe controlar el impulso por comprar bienes durables como zapatos, en este caso si se cuenta con suficientes pares para llegar a fin de año optar por destinar ese dinero a la compra de despensa, asimismo en el caso de prendas de vestir o electrodomésticos que no sean indispensables”. 

Negociaciones salariales se complicarán 

De acuerdo con el especialista, la carrera desigual entre precios y salarios, donde los precios son la liebre y los salarios, la tortuga, está ocasionando la pérdida de poder adquisitivo, lo que desencadenará una demanda de aumento de salarios justa. 

A finales de 2022 o inicios de 2023 vendrán negociaciones salariales complicadas porque lo mínimo que se exigirá será un incremento de 8% para poder recuperar el poder adquisitivo que se ha perdido”. 

Recordó que los aumentos de salarios nunca son para anticipar la inflación, sino para reponer lo que ésta se “comió”. 

Consideró complicado que los empresarios accedan a otorgar un incremento salarial cercano a la proporción que se requiere para que se recupere el poder adquisitivo. 

Además, destacó que el incremento de mano de obra tradicionalmente es trasladado a los costos de productos y servicios a inicios de año, por lo que la inflación podría tardar todavía más en ceder de lo que se anticipa. 

Por: Karla Ponce

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