Temor a una recesión económica afecta la confianza del consumidor

La confianza de los consumidores agudizó su retroceso y cayó por tercer mes consecutivo en julio de este año. 

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía y el Banco de México reportaron que el indicador descendió 1.66 unidades en julio respecto junio, la caída más alta en magnitud desde abril de 2020, es decir, en pleno confinamiento por la pandemia de covid-19, mes en el que se desplomó 10.26 unidades. 

Los cinco componentes del índice tuvieron retrocesos. Las mayores caídas fueron los relacionados con la situación económica futura: la de los hogares retrocedió en 2.08 puntos y la del país, 2.05 puntos. 

En el comparativo anual, la confianza del consumidor en julio se ubicó 2.97 unidades por debajo del nivel del mismo mes de 2021, lo que constituyó el segundo retroceso seguido en tasa anual. 

Por su parte, de los 10 indicadores complementarios que se miden en la confianza, nueve cayeron, destacando la percepción sobre la situación del empleo en 12 meses (2.2 puntos) y la situación económica personal esperada en 12 meses (1.9 puntos). 

En alerta 

Marcos Arias, analista de Monex, consideró que el mal resultado de julio de la confianza del consumidor sugiere un cambio fundamental en la percepción del entorno económico que prevalece entre la población. 

El resultado prende las alertas sobre la cautela con la que podrían responder los consumidores ante un panorama que se complica velozmente y en el que las fuertes presiones inflacionarias han logrado sostenerse por varios meses”, comentó. 

Alfredo Sandoval, analista de Banco Base, explicó que “la caída registrada en julio va de la mano con las crecientes preocupaciones de que la economía de Estados Unidos se encuentra cerca de caer en recesión, lo cual llevaría a México a entrar en una recesión también”.

Comentó que ésta podría estar relacionado con que los componentes que más retrocedieron en julio fueron la situación económica futura de los hogares y del país, que habían repuntado en meses anteriores dada la expectativa de recuperación de la economía mexicana. 

El especialista de Monex, Marcos Arias, expresó que la confianza del consumidor, de los primeros datos económicos que se conocen en el mes, por sí sola plantea un escenario bastante negativo. 

Las caídas que se registraron parecen comunicar que los consumidores han dado crédito a las versiones de que una nueva recesión económica es inminente, lo que podría incidir en un ajuste en su comportamiento y abonar al clima de desaceleración por el que transitamos”, comentó.

Consumo se desacelera 

El indicador Big Data de Consumo de BBVA arrojó un aumento de 0.5% mensual en julio, con una caída del sector servicios (0.8%) y un modesto crecimiento del gasto en bienes (1.1%). La institución destacó que el consumo viene desacelerándose por la debilidad de los servicios.

Por: Paulo Cantillo 

*amm.