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CIUDAD DE MÉXICO.
Los empresarios reunidos en la Confederación de Cámaras Industriales (Concamin) aseguraron que es difícil recuperar la confianza de inversionistas nacionales y extranjeros ante la falta de Estado de derecho, los altos niveles de violencia y los cambios en las reglas del sector energético.
Durante el décimo Informe Covid Industrial, el vocero de la Concamin, Raúl Picard, enfatizó que la “confianza industrial se perdió”, pues cada día continúa el robo al autotransporte, la inseguridad se ha incrementado en diversas entidades del país y no se pone atención al Estado de derecho.
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Como veo el panorama, mantengo mis inversiones, pero con lo que tengo y no más, porque no me siento apoyado, no veo futuro, no me siento querido”, expresó el también dueño de la chocolatería Picard.
Ello, luego de los recientes informes que apuntan a que México perdió atractivo para los inversionistas y perdió lugares en competitividad. En el ranking que elaboró la consultora Kearney el país salió de la lista de las 25 economías más atractivas para la Inversión Extranjera Directa (IED).
En el ranking de competitividad del IMD Business School, la nación también perdió posiciones, pues se pasó de lugar 50 al 53, de un grupo de 63 países que miden la competitividad.
Desgraciadamente, el palo está dado, la confianza como industrial se ha perdido y queremos ver un país seguro y podemos caminar seguros”, insistió Picard.
Dijo que el gobierno debería reconocer que los generadores de riqueza son las industrias y los empresarios, para que se genere el crecimiento económico de largo plazo. “Si sigue pateando el pesebre, no habrá inversión en México”, expresó.
Guillermo Funes, también vocero de la central industrial, acusó que sigue sin entenderse la problemática en el sector energético, con cambios y tarifas eléctricas que afectan la competitividad de un sector fundamental.
Tras una reunión, el presidente de la Junta de Conciliación Política del Senado, Ricardo Monreal, pidió al sector empresarial olvidar el enfrentamiento y la desconfianza para emprender la reconciliación con el gobierno federal.
Es necesario un reencuentro entre el presidente Andrés Manuel López Obrador y los hombres de negocios. Tenernos confianza para potencializar el crecimiento económico, para generar la atracción de inversiones, para que haya mayores flujos comerciales a nuestro país”, dijo el legislador.
Reconoció que los empresarios han creado plazas laborales y están luchando por mantenerlos. “Nadie esperaba esta pandemia y nadie estaba consciente de los efectos que tendría, sin embargo, esta conciliación no quiere decir que exista un desencuentro permanente”.
Dijo que el reencuentro permitiría preservar lo construido en el tratado comercial de Norteamérica y potenciar la relación en la región, además de que México podría capitalizar el hecho de que las empresas buscan revertir su concentración en una sola región geográfica.
Francisco Cervantes, presidente de la Concamin, aseguró que no ha habido ningún rompimiento entre el sector que representa y el gobierno, pero sí reconoció que hay “un distanciamiento”.
El gobierno federal tiene la capacidad de reducir la mortandad de las empresas durante la pandemia, “con el otorgamiento de incentivos fiscales condicionados a la conservación de empleos”, consideró Carlos Serrano, economista en jefe de BBVA México.
El gobierno aún está a tiempo de salvar a muchas empresas, sobre todo de pequeño y mediano tamaño que enfrentan problemas de solvencia, no con la condonación de impuestos, sino con el diferimiento a un año condicionada a que no se reduzca el número de empleos”, indicó durante la presentación del Informe Situación Banca correspondiente al primer semestre de 2020.
Dijo que la postergación de las obligaciones fiscales daría liquidez a las empresas para reiniciar operaciones, en tanto que el gobierno no perdería la captación de esos recursos, dado que estos sólo se aplazarían.
La mejor forma de evitar que un mayor número de personas caiga en la pobreza es protegiendo el empleo y la vía más directa para hacerlo es ayudando a que más empresas sobrevivan la pandemia”.
Recordó que esta estrategia económica se está ejecutando en una gran cantidad de países a fin de contener el nivel de desempleo.
El nivel de morosidad de las personas y empresas afectadas por la paralización de economía para evitar la propagación del covid-19 será controlables para la banca dado que hacia final de año alcanzará el 5%, anticipó Serrano.
Sí se prevé un aumento en la morosidad, pero prevemos que sean aumentos controlables, al final del año en el escenario más pesimista puede ser de 5%, lo cual puede ser perfectamente absorbido con el nivel de provisiones que tiene la banca”.
Al primer trimestre de 2020, el índice de morosidad del crédito para el sector privado no financiero fue de 2.6%; el segmento al consumo tiene el registro más alto de 4.4%, para empresas fue de 1.8%, y 3% en crédito a vivienda. Todos ellos con un alza de 0.1 puntos porcentuales respecto a los indicadores del mismo periodo de 2019, con excepción de vivienda, que se elevó 0.5 puntos.
Refirió que la contención de estos índices de morosidad dependerá de la reactivación económica del país, pero consideró que será favorecida por el programa de diferimientos pagos de la banca comercial por hasta seis meses
No habrá un incremento de morosidad que no sea controlable”.
–Karla Ponce
AMU
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