HSBC: optimismo sobre México

Independientemente de quién gane las elecciones presidenciales, el presidente de HSBC en México, Jorge Arce, se mantiene muy optimista sobre el desarrollo económico del país, y no sólo por el nearshoring, sino por el andamiaje que se ha construido desde hace 30 años como uno de los principales países exportadores del mundo, con un volumen de 600 mdd anuales.

Las empresas mexicanas, sostiene Arce, están acostumbradas a competir con otros países y no sólo las grandes empresas, sino también las medianas y pequeñas, que son hoy líderes mundiales en exportación en una gran cantidad y variedad de productos, que van desde escaleras de aluminio hasta berries.

Sostiene que el nearshoring es ya una realidad, no sólo por la cercanía de México a Estados Unidos, sino por su estabilidad económica y porque otro atractivo es el crecimiento del mercado interno. En el caso de empresas, no sólo de China, sino de otros países asiáticos, una de las ventajas de HSBC es que es el banco más global en México y son ya clientes del banco en sus países de origen.

El optimismo de Arce se sustenta también en los mejores resultados del banco y el crecimiento de su cartera. En el caso de HSBC, descarta abrir un banco digital porque —dice— ya es un banco digital, facilitando la apertura en línea de cuentas hasta por 3,000 udis y mantiene una inversión de 100 mdd anuales en su área de Sistemas.

Desde luego, Jorge Arce reconoce que hay riesgos. Entre los locales destaca, en primer lugar, la inseguridad y, en los internacionales, las elecciones en Estados Unidos ante amenazas proteccionistas comerciales que podrían traducirse en una desaceleración económica que, de concretarse, afectaría a México.

IRENE ESPINOSA, LA DISIDENTE EN EL BANXICO

Como anticipaban todos los analistas del sector privado, la Junta de Gobierno del Banco de México, que preside Victoria Rodríguez Ceja, redujo las tasas de interés en 25 puntos base, de 11.25% a 11.0 por ciento.

La reducción en las tasas se registró a pesar de que el Banxico elevó ligeramente su pronóstico de inflación este año de 3.5% a 3.6 por ciento. El Banxico reconoce que persisten riesgos inflacionarios que obligan a mantener un manejo prudente de la política monetaria y reitera que será en el segundo trimestre de 2025, cuando la inflación regrese a la meta de convergencia con una tasa anual de 3.1 por ciento.

La sorpresa es que es la primera vez en el año en que la decisión no es unánime por el voto disidente de la subgobernadora Irene Espinosa Cantellano, quien votó a favor de mantener las tasas sin cambio.

PRIMER CAMBIO EN LA JUNTA DE GOBIERNO

Por cierto, Irene Espinosa termina su periodo como subgobernadora del Banco de México a fines de este año y, aunque cumple con todos los requisitos para ser reelecta un nuevo periodo, será la primera oportunidad que tendrá la nueva presidenta de la República para hacer un cambio en la Junta de Gobierno del Banxico. Si llegara a ganar Claudia Sheinbaum, lo más seguro es que no dejaría pasar la oportunidad para hacer un cambio en la Junta de Gobierno y nombrar alguien más afín a su administración. Irene Espinosa es, por cierto, la única que no fue propuesta por el presidente López Obrador. La duda es qué haría Xóchitl Gálvez si gana la elección presidencial.

Tomaré uno días de vacaciones. Esta columna volverá a publicarse el próximo martes 2 de abril. Hasta entonces.