Señales piratas, interferencias y

La integración del Observatel, que preside la especialista y abogada en telecomunicaciones Irene Levy, es una muestra de cómo el sector está sediento de coordinación, competencia profesional, diálogo, transparencia y congruencia.

Para muestra un botón. Desde noviembre, no sólo Telcel de Daniel Hajj, sino también Telefónica, que encabeza Francisco Gil, han experimentado por lapsos inestabilidad en su red 3G provocada por varios hechos, pero en particular una fuerte interferencia que ha sido identificada por técnicos externos y de los proveedores del equipo, en la Cofetel que preside Mony de Swaan, y la SCT, que ahora encabeza Dionisio Pérez-Jácome, y se discute toda clase de ideas que llegan a acusar que la inestabilidad de las redes y la afectación a usuarios es producto de una confabulación entre Telcel y Telefónica, para compensar, con la caída de llamadas, parte de los ingresos que pierden por el acuerdo de baja en las tarifas de interconexión al que llegaron en diciembre pasado (sic).

Sí, lo leyó bien. Por lo que he averiguado entre uno y otro operador, la interferencia ha afectado a todos, incluyendo a Iusacell del Grupo Salinas y a Nextel de Peter Foyo, porque se está dando sobre  la banda de 850 Mhz y en la parte baja de la 1.9 Ghz.

También es cierto que la Cofetel está como maniatada, pues con sólo 27 verificadores, escaso presupuesto, unas cuantas camionetas y mucha grilla, se muestra incapaz de realizar un barrido en la zona del Valle de México para identificar si la interferencia se deriva de una extraña señal que debiera ser reportada como asunto de seguridad nacional, o de la transición a la tecnología GSM que está corriendo Iusacell sobre esa banda, o de la transición de analógico-digital de las frecuencias de radio en la zona metropolitana que obliga a impulsar la señal con potenciadores, o de un trunkeo que ha aumentado su potencia para alcanzar una parte más amplia del Valle de México, o del espectro percudido que entregaron en la licitación 20, o de  miles de antenas que se plantan por todos lados para radioaficionados o sistemas de comunicación privada.

Si usted lo piensa, una empresa gana no por las señales que se caen, sino por el tiempo en que se mantiene una llamada, e insisto, todas las operadoras de telefonía móvil están experimentando problemas, y en Telcel o Telefónica el efecto es más visible simplemente porque son las que tienen mayor mercado.

De Fondos a Fondo

Pues resulta que por más vueltas que se le da al tema de Mexicana, las cosas siguen casi en el mismo lugar. Calma chicha, dicen los que están cerca, pues el titular de la SCT, Dionisio Pérez-Jácome, se la piensa ir con pies de plomo para revisar la solvencia de inversionistas y sostenibilidad financiera del proyecto. Por cierto, no se ha dado la capitalización de la empresa y sigue pendiente el arreglo entre PC Capital con Arturo Barahona y los abogados de Tenedora K. Avanza el acuerdo con acreedores que, podría estar esta semana, pero una vez que el juez publique, tendrán que esperar 15 días para que se apruebe.

En cuanto a la venta de boletos, no han iniciado los trámites formales ante la IATA para las compras interlineales y para reingreso en el banco de compensaciones de la industria.

No se ha avanzado en los adeudos ni con la IATA ni hay arreglos con las globalizadoras (Amadeus o Navitaire) que podrían ser las que pongan los sistemas de reservaciones para la venta de boletos de Mexicana 2.0.

A sólo 15 días de que venció la patente de Lipitor, uno de los medicamentos estrella de Pfizer, que en México encabeza Jorge Bracero, Medi-Mart (ya tiene 334 genéricos) lanzó el genérico Atorvastatina que será distribuido en su red de farmacias y que, supone para las personas que se tratan de altos niveles de triglicéridos y colesterol, un ahorro estimado en más de 30% del valor del producto de patente.

También ayer el Cuarto Tribunal Colegiado en Materia Administrativa le ratificó la suspensión definitiva a Degort’s Chemical y le eliminó la fianza que le había fijado un juez (70 millones de pesos) hasta en tanto no se resolviera el fondo del amparo. Con ello podrá fabricar y vender el genérico de Sindenafil (Viagra). Evidentemente se difundió como una de las peores derrotas legales de la compañía Pfizer porque ésta había solicitado una revisión para que se le incrementara el monto de la caución en el incidente de suspensión, luego de que el juez determinó que sí tenía registro sanitario otorgado por la Cofepris, que encabeza Miguel Ángel Toscano.

En México se venden más de dos millones de pastillas de Viagra al año, lo que le convierte en el séptimo consumidor mundial del medicamento y el mayor de América Latina, ya que el sindenafil no sólo sirve para la disfunción eréctil sino también para tratamientos del corazón y presión pulmonar, al grado de que es uno de los medicamentos más “caros” del cuadro del sistema de salud.

Así que la presión sobre el sistema judicial encontrará toda clase de avenidas.